MIAMI. Vamos a realizar un juego. Implica sumar. El ganador debe alcanzar la suma de al menos 270. Y lo hacemos contando los votos del Colegio Electoral.
Las proyecciones se basan en las últimas encuestas. Esto no es científico y no es un pronóstico. Es demasiado temprano, especialmente en lo que parece ser la elección más extraña en la historia del país. Frente a la pandemia de Coronavirus, ya he escrito que Joe Biden, el ex vicepresidente y candidato del Partido Demócrata, va al frente en casi todas las encuestas mientras se esconde en el sótano de su casa en Connecticut. Y el presidente en ejercicio está ansioso por abrir el país a expensas de más muertes, más de 80 000 ya, y sigan contando.
Comencemos por Joe Biden y cómo se ven las cosas en los estados donde los electores, en este punto al menos, se inclinan a su favor. Los números son lo que cada estado representa en cuanto a votos en el Colegio Electoral. Viajaré de Oeste a Este:
Hawái (4); California (55); Oregón (7); Washington (12); Nevada (6); Colorado (9); Nuevo México (5); Minnesota (10); Illinois (20); Nueva York (29); Vermont (3); Nuevo Hampshire (4); Massachusetts (10); Rhode Island (4); Connecticut (7); Nueva Jersey (14); Delaware (3); Maryland (10); Distrito de Columbia (3); Virginia (13); Maine (4)
Si las elecciones se celebraran esta semana, las encuestas muestran que Biden obtendría al menos 233 votos del Colegio Electoral. Pero como dije al comienzo de este juego, para ganar, uno tiene que alcanzar el número mágico de 270.
Ahora veamos los números del presidente Trump:
Alaska (3); Idaho (4); Utah (6); Montana (3); Wyoming (3); Dakota del Norte (3); Dakota del Sur (3); Nebraska (5); Kansas (6); Oklahoma (7); Texas (38); Iowa (6); Misuri (10); Arkansas (6); Luisiana (8); Indiana (11); Kentucky (8); Tennessee (11); Mississippi (6); Alabama (9); Ohio (18); Georgia (16); Carolina del Sur (9) Virginia Occidental (5); Maine (1)
El recuento de Trump es de 204. Tampoco gana.
Así que echemos un vistazo a los estados que en este momento se consideran una incógnita:
Arizona (11); Wisconsin (10); Michigan (16); Pensilvania (20); Carolina del Norte (15); Florida (29).
En otras palabras, hay 101 votos de colegios electorales en el aire. ¿Quién los gana?
Comparemos los estados en los que hemos decidido que cada candidato gana: en el caso de Biden, de sus 233 votos, 182 son lo que podemos llamar votos “seguros”. En otras palabras, Biden ganará esos estados. En el caso de Trump, sus votos “seguros” están en 126. Ventaja para Biden.
Luego, examiné los estados donde puede ganar cualquiera de los dos, estados decisivos. Los he enumerado arriba. Son Wisconsin, Michigan, Pensilvania, La Florida, Carolina del Norte y Arizona.
En Wisconsin, Biden aventaja a Trump en un promedio de encuestas por un 2,7 por ciento. (Trump venció a Hillary Clinton aquí en 2016). En Pensilvania, Biden lidera a Trump en un promedio de encuestas por un 6,5 por ciento. (Nuevamente, Trump venció a Hillary aquí en 2016). En La Florida, Biden lidera a Trump en un promedio de encuestas por un 3,2 por ciento. (Trump venció a Hillary en este estado en 2016). Pero un momento, en Carolina del Norte, Trump aventaja a Biden en un promedio de encuestas por un 0,3 por ciento. En Michigan, Biden aventaja a Trump en al menos 7 puntos porcentuales. (Trump ganó aquí en 2016). Y finalmente en Arizona, Biden está venciendo a Trump por 9 por ciento.
Así que hagamos esto. Démosle a Biden Pennsylvania, Wisconsin, Arizona y Michigan. Y en aras del juego, le daré al presidente La Florida y Carolina del Norte.
Cuando se suma todo, Biden recibe 57 votos más del Colegio Electoral. Y Trump obtiene 44. Agregue los 57 de Biden a los 233 que ya tiene, y se obtiene una suma ganadora de 290 votos del Colegio Electoral. Trump termina con un número respetable de 248 votos, lo que hace reñida esta elección.
Lo sé. Todo esto es un juego. Y todavía tiene que comenzar realmente. Pero los últimos meses no han sido buenos para Donald Trump. El presidente de tiempos de guerra, como se autocalificó al comienzo de la pandemia, ha perdido, en dos meses, más personas inocentes de las que se perdieron durante más de una década en la guerra de Vietnam. Según mi opinión, eso lo convierte en un presidente fallido en tiempos de guerra. La economía, el único reclamo de Trump a la fama en otros tiempos, ahora está en su punto más bajo: la pérdida de empleos, el desempleo y las empresas al borde de la bancarrota están en cifras que no se han visto desde la Gran Depresión hace casi un siglo. Por supuesto, no todo es consecuencia de lo que Trump está haciendo. Él no tiene la culpa del virus, pero cuando un presidente abraza una economía (que heredó de Obama), debe aceptar lo bueno y lo malo. Así que también ha fracasado en la economía.
Una última cosa me hace pensar que en este momento Trump tiene problemas reales. Y ayuda a explicar el cambio en los estados decisores. Históricamente, los electores más confiables son los ancianos, personas mayores de 65 años. Según lo informado por Los Angeles Times, “en su victoria de 2016, Trump se ganó a los electores de 65 años o más en todo el país por nueve puntos porcentuales, 53 por ciento a 44 por ciento, según el Instituto de Investigación Pew”.
Aquí está el problema [para Trump] según el LA Times: “Hoy [en comparación con las elecciones de 2016], eso se invierte. En lugar de una ventaja de nueve puntos entre las personas mayores, Trump ahora tiene un déficit similar en muchas encuestas.
“Eso es decisivo, porque las personas mayores representaron poco más de una cuarta parte del electorado en todo el país en 2016, según los resultados de Pew. Su apoyo fue clave para la victoria de Trump en cada uno de los principales estados decisivos”.
Regreso al principio. Todo esto no ha sido más que un juego, pero basado en buena información. Trump no está en buena situación, por el momento. De aquí a noviembre, las cosas pueden cambiar. Prácticamente de la noche a la mañana, como hemos aprendido en los últimos meses.
Mientras tanto, si ya son electores, comprométanse a encontrar a otros cinco electores que emitan su voto en noviembre. Por cierto, asegúrense de que no sean para Trump. Si son elegibles y no están inscritos, ¿qué están esperando? Sé que ya han escuchado esto un millón de veces, pero es cierto: esta próxima elección para presidente es la más importante de nuestra vida.
Voten. Contra Trump o por Biden, pero voten.
Traducción de Germán Piniella para Progreso Semanal.
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