ENTRE CARAJILLOS TE VEAS

Siempre se comenta que las generaciones que están naciendo traen, en vez de un pan debajo del brazo, conocimientos de vida muy adelantados. Eso es cierto, mis nietos, dos hombrecitos de 10 y 6 años dan la impresión de que tienen mucho tiempo viviendo por las conversaciones que siguen con un adulto y la lógica que le aplican a sus comentarios. Solo pregunto y el nieto que me falta ¿será que llegará hablando del Teorema de Pitágoras al abrir los ojos? Son cosas que nos tiene que llevar a la reflexión porque si eso es así, los padres y qué decir de las abuelas ya deberíamos estar hojeando los libros para ponernos al día de todo lo que estudiamos hace tiempo y de lo nuevo que está saliendo.

Pero así como los niños están cambiando, a medida que pasa el tiempo. Las mujeres entradas en añitos, esas  de la época de los 50 y 60, ya no son las mismas. Antes las mujeres que llegaban a esa edad, se les reconocía como “Doñitas”, bueno aún se les dice así y no se imaginan las rabietas que forman. En cualquier casa las encontrabas en una mecedora tejiendo, a la vez que oían o veían las novelas que eran furor en el momento. También estaban metidas en la cocina preparándoles a la familia los suculentos platos que tanto les gusta. ¿Quién no se quedó cuidando nietos, mientras que los hijos se iban a la Discoteca o a pasear con la excusa de quitarse el estrés del trabajo? sin pensar que la abuela estuvo todo el día estresada cuidando muchacho. Ustedes preguntarán ¿A qué se debe tanta alharaca con relación a las mujeres de edad avanzada? Sencillo, así como los niños cambian de generación en generación, lo mismo les pasa a las mujeres. Antes de seguir conversando, no puedo dejar de percibir un aroma a café recién colado que por mi ventana se cuela invitándome a perseguirlo. Ustedes sabrán disculparme pero el tema de la mujer y sus andanzas, no pueden ser tratados sin un cafecito recién hecho.

Por ser un tema que me apasiona, le coloqué un chorrito de ron a mi café y ahora puedo decir que estoy tomando un “Carajillo”. Como veníamos hablando, la mujer madura o de experiencia es muy distinta a las de otrora. Hoy, gracias a la tecnología y las luchas alcanzadas por mi gremio, podemos decir que el que llegue a vieja, perdón, a madura y esté amargada y sola, es culpa de ella misma.

Un sorbo y me parece que este cafecito cobró más cuerpo que el anterior. Si mi amiga sabe que estuve escribiendo y tomándome un café aliñado, no me lo perdonará jamás, por lo que mejor seguimos atrincheradas en silencio para conversar con ustedes. Mañana que es el día de las amigas, estoy segura que sacaré tela para cortar junto a ella y sus maravillosas reflexiones.

La mujer que en su madurez consigue enamorarse y que se enamoren de ella puedo decir que será el ser más feliz del mundo. Llevamos en nuestros poros experiencia acumulada. Recuerdos de piel, donde nos hubiese gustado que nos hicieran sentir más y en el sitio exacto. Es en este momento en que, sin penas podemos hacer entender ¿Qué es lo que queremos? Claro esto puede pasar si las relaciones anteriores no nos han dejado cicatrices en el alma y en la mente.

 Cuantas veces no nos atrevimos aceptar un piropo o un halago por el solo hecho de sentirnos viejas y en desuso. Y así estábamos dejando pasar lo que nos restaba de vida, con la convicción de que ya no éramos aptas para amar. Hay personas a quienes les gusta etiquetar a otras y fácilmente se ríen cuando ven a dos personas mayores besándose o haciéndose cariños. Y no estoy hablando de jóvenes, que hasta se les entienden ya que la juventud es muy egoísta, yo pasé por ahí. Hablo de seres de nuestra misma edad que critican a las otras por que se atreven amar, sin importar que ya tienen sopotocientos  nietos.

Amigas, las invito a darles la espalda a todo aquel que no entienda que tú eres un ser vivo con necesidades y sueños. Las invito a ¡VIVIR! sin importar el qué dirán o cómo lo dirán. Nosotras somos las hijas de Venus por lo que tenemos derecho a ser amadas hasta la saciedad y hasta que el de arriba nos mande a buscar.

No permitas que nadie y engloba en esa palaba “NADIE” amigos, familiares y anexos, te diga si tienes derecho o no. Hay un poema muy hermoso, el cual se llama “DESIDERATA” te lo recomiendo, nos veremos muy pronto con un cafecito entre nosotras. En una de sus estrofas dice:

“Muchos temores nacen de la fatiga y la solidad. Sobre una sana disciplina se benigno contigo mismo. Tú eres una criatura del universo no menos que las plantas y las estrellas, tienes derecho a existir y sea que te resulte claro o no, indudablemente el universo marcha como debiera. Aún con todas sus farsas, penalidades y sueños fallidos EL MUNDO ES TODAVÍA HERMOSO… ¡Se cauto!... ¡ESFUERZATE POR SER FELIZ!”

Carmen Pacheco

carbeatriz@hotmail.com

21 de junio de 2013