De: Perucho Figueredo
Para: Figueredo Perucho
Enviado: Lunes 20 de febrero de 2012 16:18
Asunto: Spd 84
SPD
No. 84 (6/ año 4). La Habana, 20/Febrero-2012
“Se reconoce a los ciudadanos libertad de palabra y prensa conforme a los fines de la sociedad socialista”.
Art. 53 de la Constitución
Boletín por un socialismo más participativo y democrático.
Artículos, notas, reseñas, publicaciones de interés.
Los autores son los responsables de sus escritos.
Reenvíe este boletín a todos los que estime conveniente.
Se autoriza la reproducción total o parcial en cualquier soporte.
Recopilador: Pedro Campos CE perucho1949@yahoo.es
Se agradece todo tipo de participación y colaboración, artículos, críticas, comentarios, sugerencias y opiniones sobre forma/contenido
ÍNDICE
De las Propuestas del SPD
El análisis actual de algo que expresó el Che…
Crónicas cubanas
Félix Sautié Mederos
La indisciplina social: algunas ideas sobre sus causas y soluciones
Mientras los trabajadores y el pueblo no decidan directamente sobre el uso de los recursos y las disposiciones importantes que los afectan, existirán razones para las indisciplinas sociales
Por Pedro Campos
Los fondos del gobierno son tuyos
Por Ramón García Guerra.
Trabajo educativo de la Coordinadora Centroamericana de Autogestión y Vivienda Solidaria
Febrero 2012 (Boletín No 77)
Asumir las discrepancias con naturalidad y respeto
Crónicas cubanas
Félix Sautié Mederos
Sombra de la Luz
Por Félix Guerra
CONTENIDO
De las Propuestas del SPD
Tomado de las “Propuestas para el avance al socialismo en Cuba”. Versión revisada, actualizada y completada con los aportes recibidos de “Cuba necesita un Socialismo Participativo y Democrático. Propuestas programáticas” (agosto de 2008), presentadas al pueblo, a los trabajadores y a los revolucionarios cubanos, a propósito de la convocatoria del VI Congreso del PCC. La Habana, 28 de enero de 2011, en el 158 aniversario del natalicio de José Martí.
2-Perfeccionar el sistema democrático de elecciones de acuerdo con la democracia participativa y directa: modificar todas las regulaciones en la Constitución y en la ley electoral que limitan la participación directa y decisoria del pueblo en el actual sistema político y ponerlas a tenor con el Artículo 1ro de la Constitución, el cual establece: “Cuba es un Estado socialista de trabajadores, independiente y soberano, organizado con todos y para el bien de todos, como República unitaria y democrática, para el disfrute de la libertad política, la justicia social, el bienestar individual y colectivo y la solidaridad humana.”
Introducir, entre otras, las siguientes modificaciones a la actual ley electoral:
-Como sería el pueblo, según está en el espíritu de nuestra constitución, el que decida todo, directa y democráticamente, ningún partido político, tampoco el PCC, debe actuar sobre el sistema electoral y como parte de la misma libertad de prensa, reunión y asociación que deberá regir, ésta no podría ser usada para realizar propaganda electoral en función de llevar a algún partido al poder político, pues la historia mundial ha demostrado que los partidos en el poder, de cualquier color, privilegian sectariamente los intereses de las fuerzas y figuras que representan, aún cuando traten de encubrirlos en populistas enunciados políticos y económicos.
-El Partido Comunista ejercería su influencia en la sociedad porque se la gane y no porque se le otorgue constitucionalmente, como establece actualmente el artículo 5to de la Constitución.
-Todos los cargos, a todos los niveles del Poder Popular, serían electos por el voto popular, directo y secreto y todos los ciudadanos participarán activamente en las propuestas para cargos electivos a todos los niveles.
-Establecer tiempo límite en todos los cargos, no más de 5 años, con una sola reelección y revocabilidad inmediata por acuerdo de la mayoría simple de los electores correspondientes, con un referendo revocatorio obligatorio de aprobación a mitad de término. Se eliminaría todo tipo de prebenda para cargos, que recibirían ingresos promedios conforme a su responsabilidad. Se eliminaría la meritocracia.
-Se modificaría la forma de integración actual (designación) de las comisiones de candidaturas a todos los niveles y se crearían comisiones electorales escalonadas a propuestas de las bases respectivas. En el barrio por los vecinos. En el Municipio, la Provincia y la Nación por los delegados elegidos en cada nivel.
-Revisar la actual estructura político-administrativa por Provincias. Convertir los municipios en la estructura principal e impulsar sus asociaciones de diverso tipo de acuerdo con sus intereses.
-Eliminación de la actual dualidad de cargos entre el ejecutivo (Consejo de Ministros) y el legislativo (ANPP).
-Establecer referendos nacionales para decisiones importantes que afecten el destino del país y de todos los ciudadanos
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El análisis actual de algo que expresó el Che…
Crónicas cubanas
Félix Sautié Mederos
Con motivo de la culminación de la Primera Conferencia Nacional del Partido Comunista de Cuba y la divulgación de sus resultados que, en mi opinión, expresan algunas cuestiones importantes alcanzadas así como frustraciones de esperanzas que se esfuman o se dilatan en el tiempo, considero que esencialmente queda pendiente de solución un asunto de fondo sobre la vanguardia política y sus relaciones con la población en su conjunto. Esto lo percibo a partir del reiterado concepto de la Revolución de los humildes, por los humildes y para los humildes que tantos esfuerzos y sacrificios ha implicado para el pueblo cubano en estos 50 y tantos años transcurridos.
En tales circunstancias he recordado algo que expresó Ernesto Che Guevara en “El socialismo y el Hombre en Cuba”, a quien también se puede considerar por los que no comparten sus ideas, como un ejemplo de consecuencia hasta el final de sus días y cito: “… El estado se equivoca a veces. Cuando una de esas equivocaciones se produce, se nota una disminución del entusiasmo colectivo por efectos de la disminución cuantitativa de cada uno de los elementos que lo forman, y el trabajo se paraliza hasta quedar reducido a magnitudes insignificantes: Es el momento de rectificar…”; también expresó al respecto de las “masas” en ese mismo artículo que: “Todavía es preciso acentuar su participación consciente, individual y colectiva, en todos los mecanismos de dirección y producción…”
Con independencia de las circunstancias del momento en que el Che expresó estas consideraciones en el Semanario Marcha, de Montevideo, el 12 de marzo de 1965, e incluso más allá de la aceptación o no de sus conceptos de “vanguardia” y “masas”, considero muy importante tomar en consideración en las circunstancias actuales lo referido a la llegada del “momento de rectificar”, así como a la necesidad imprescindible de la participación directa y efectiva de las personas (expresadas por Che con el término “masas”) en el actual proceso socio político, de acuerdo a su concepto sobre las relaciones entre la vanguardia y la masa.
Por otra parte, es muy lamentable que después de 50 y tantos años de proceso revolucionario se plantee el reconocimiento tácito que no se cuenta “con una reserva de sustitutos experimentados y maduros con preparación suficiente para asumir las complejas funciones de dirección del Partido, el Estado y el Gobierno”. Lo que se expresa al respecto, visto a la luz del alto nivel cultural alcanzado por el pueblo como consecuencia de la Revolución Educacional de los últimos 50 años, plantea una gran contradicción. Sus causas principales, en mi criterio, están dadas como consecuencias de un sostenido proceso de centralización extrema de la sociedad que ha inmovilizado, silenciado y burocratizado la participación y la creatividad del pueblo cubano, que como conglomerado humano actualmente presenta evidentes signos de desencantos, desesperanzas y heridas que afectan su entusiasmo por la participación que es imprescindible recuperar
Concuerdo que estamos ante un asunto estratégico de fondo que, en mi criterio, requiere de una rectificación radical de las concepciones del “Socialismo Real” que se han intentado poner en práctica en Cuba. Para solucionarlo, en mi criterio, es necesaria la instrumentación de un Socialismo Participativo y Democrático que facilite las libertades de conciencia, pensamiento, expresión, creatividad, asociación y movimientos externos e internos de la población, con un sistema político de referéndum así como económico y productivo de descentralización, cooperativización, autogestión laboral y mercados regulados por la ley, que incluya la promoción de las pequeñas empresas familiares y locales así como de inversiones extranjeras que propicien capital, mercados de exportación y tecnologías. Todo ello deberá estar enfocado a lograr el más pleno ejercicio y participación popular en las actividades económicas, políticas y sociales. Entonces se facilitaría el descubrimiento de los cientos de miles de cuadros emprendedores que potencialmente se encuentran menospreciados en toda la extensión de nuestra geografía y de la extendida diáspora cubana, a la que es imprescindible reconocerle su derecho a participar en el desarrollo de la Patria que los vio nacer.
No todos los cubanos somos posibles enemigos, ni vagos propensos a la corrupción. Esas concepciones implícitas en las prohibiciones absurdas y en la centralización extrema así como en algunos planteamientos públicos, es injusta y estrecha y ha llegado el momento de erradicarlas. Propiciar el amor a la Patria con los principios éticos básicos de responsabilidad en la libertad constituye una acción que se contrapone a los autoritarismos contra natura, así como a las descalificaciones y exclusiones a quien piense distinto. Propiciar al pueblo verdadera autoridad y participación efectiva, lejos de ser un debilitamiento del país frente a los intentos anexionistas y de sojuzgación externa, significaría el mayor fortalecimiento posible a la nación cubana que está conformada por todos los cubanos y no por un único grupo de cubanos por muy conscientes que ellos puedan ser. Además, con la implementación del control de los trabajadores asociados en los planeamientos y resultados de la producción y de los servicios; y no de simples asalariados explotados, se aumentaría conscientemente la economía del país y se enfrentaría con efectividad a la corrupción.
La corrupción no sólo hay que reprimirla y castigarla, lo más importante es hacerla intrínsecamente imposible por medio de la participación directa de la población y del control efectivo de los trabajadores en los centros laborales.
Concuerdo también con lo planteado por el Presidente Raúl Castro sobre la necesidad de “dejar atrás el lastre de la vieja mentalidad y forjar con intencionalidad transformadora y mucha sensibilidad política, la visión hacia el presente y el futuro de la Patria…”. Pero para lograrlo es preciso poner a la población al centro de todo así como realizar una profunda renovación de cuadros, junto con un análisis exhaustivo de las verdaderas causas de la Caída del Socialismo Real en Europa y en otros países. Así pienso y así lo afirmo con el ánimo de coadyuvar a la solución de nuestros problemas, sin tener en cuenta descalificaciones ni amenazas veladas. E-Mail: fsautie@yahoo.com
Publicado en Por Esto! , el martes 14 de febrero del 2012.
http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=22&idTitulo=147675
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La indisciplina social: algunas ideas sobre sus causas y soluciones
Mientras los trabajadores y el pueblo no decidan directamente sobre el uso de los recursos y las disposiciones importantes que los afectan, existirán razones para las indisciplinas sociales
Por Pedro Campos
“La paz solo peligra, donde haya un sistema que produzca la indignación
que excita la injusticia en el pueblo más dócil”
J. Martí
La prensa oficial cubana muestra gran preocupación por lo que denomina indisciplina social, sin referirse a sus causas socio-económicas. Mientras los trabajadores y el pueblo no decidan directamente sobre el uso de los recursos y las disposiciones que afectan los más importantes aspectos de sus vidas, mientras no puedan decidir sobre las condiciones de reproducción de su existencia, de su vida material y espiritual, mientras las libertades y derechos ciudadanos sigan limitados, existirán razones para las indisciplinas sociales.
El conjunto de composturas que está generando una buena parte de la sociedad cubana y que, bien señalan los comentaristas del gobierno, afectan los intereses y propiedades del estado, ese que se denomina de “todo el pueblo”, pero del que en verdad disponen y se benefician fundamentalmente los burócratas, se manifiesta de muchas formas y ocuparía mucho espacio repetir lo que ya se ha dicho en los periódicos, la radio y la tv.
La campaña que se pretende desde la propagada oficial, para la solución del fenómeno, parece ser una mezcla de “concientización” por vía del trabajo persuasivo de los medios estatales de divulgación, la imposición de multas y sanciones a los infractores y la vigilancia colectiva de los ciudadanos y las tradicionales organizaciones de masas. Más/menos, lo de siempre.
El discurso oficial parte de culpar a las personas, a los de “abajo”, a quiénes nada deciden, a los que nada tienen. No hay análisis de causas. Las acciones y pensamientos de la gente tienen causas socio-económicas. Las personas no son “indisciplinadas” per se, no vienen con un “programa” de este o aquel carácter en el “disco duro”.
Ningún problema social puede resolverse sin analizar sus causas profundas. Cuando se pretenden soluciones que no parten de esas raíces, se está, una vez más, “arando en el mar”, asumiendo el voluntarismo y aportando “soluciones” solo aparentes.
La llamada indisciplina social, se observa en todas las edades, pero principalmente entre los más jóvenes. Es visible en los escritos en las paredes de cualquier lugar, en la voz alta y en las malas palabras que “adornan” cualquier espacio, en la música a todo volumen para el barrio entero; en el lenguaje chabacano, sexista y mercantilista de muchas canciones muy promocionadas en la tv y la radio nacional, toda en manos estatales; en las paradas de los ómnibus a la hora de tratar de coger la guagua, en el reguero de basura por doquier, en los muchas esquinas convertidas en vertederos públicos, en la empujadora que se forma en cualquier cola, en el poco cuidado que se observa en los barrios y edificios múltiples, en las áreas verdes, en los parques…
¿Son malas, indisciplinadas, las personas? ¿Se trata de “mala educación”? ¿Quién o quiénes son los responsables de la “mala educación”? ¿Cómo alcanzar una verdadera imbricación comunal de la escuela y una enseñanza integral? ¿Cómo lograr que las colas, no generen impaciencia? ¿Cómo no tratar de subirse en una guagua atestada, cuyas puertas pueden romperse, cuando se lleva una hora en la parada, apremia el tiempo para llegar al trabajo y no hay dinero para coger un auto de alquiler? ¿Cómo evitar los vertederos públicos, si la basura no se recoge en tiempo, los cestos y colectores son insuficientes y los camiones recogedores no alcanzan? ¿Cómo impedir los salideros de agua en las casas, cuando corren ríos de agua potable por las calles, de viejas y rotas tuberías que no han recibido mantenimiento en más de medio siglo? ¿Si cuesta medio salario, y más, una pila de agua, una llave de paso o un mecanismo de descarga de un inodoro? ¿Inspiran disciplina los edificios en ruina, declarados inhabitables y apuntalados hace decenas de años?
No pretendería abordar aquí todas las aristas del tema. Se analizan cuestiones básicas que deben tener en cuenta lo cientistas y comunicadores sociales, los “hacedores” de políticas, los que de una u otra forma se preocupan y trabajan en estos temas. Estas son algunas ideas, puede haber otras.
¿Es solo un asunto de conciencia, es también material y de organización social? ¿Es un problema de poder real?¿Cuánto tiene que ver el control real del pueblo, del Poder Popular, el de los barrios, los Consejos y los Municipios sobre el transporte, las comunicaciones, la recogida de basura, el cuidado de los parques, el agua, el mantenimiento de viviendas, la educación y la salud públicas, la salud pública y otros? ¿Cuánto tiene que ver en estos problemas disciplinarios la responsabilidad colectiva real, dada por el sentido de pertenencia que brinda el saberse con potestad para tomar decisiones relacionadas con todos esos asuntos que afectan directamente a los barrios y comunidades?
¿Tiene alguna relación la indisciplina con el nivel de insatisfacción social por la incapacidad del estado todo poseedor y todo decisor para resolver, en medio siglo de gobierno, los problemas fundamentales de alimentación, vivienda, transporte, agua y servicios comunales en general y con el excesivo control estatal sobre la vida de los ciudadanos?
¿Tendrá algo que ver el desorden, con que los trabajadores no sean dueños directos de los medios de producción con que laboran, no tengan posibilidades de opinar ni votar sobre las personas que deciden todas las cuestiones importantes en su centro de producción o servicios, no tengan posibilidad alguna de decidir qué, como, con cuánto y a qué precio se va a producir o a brindar x servicios y solo reciban una salario bajo y en pesos devaluados, sin relación alguna con el gran volumen de riqueza que genera su trabajo, resultados que van a parar a un “estado” cuyo aparato burocrático se encarga de administrarlo y distribuirlo a su modo y manera?
¿Qué tiene que ver la indisciplina laboral y tecnológica, el desvío de recursos y el incumplimiento de los planes de producción con el sistema de trabajo asalariado para el estado, donde el obrero es un simple tornillo más que se quita y se pone, en el centro de producción o servicios que pertenece al estado y produce para éste, donde los trabajadores que van y vienen, son nombrados o despedidos por un administrador nombrado y también quitado desde “el Misterio”, perdón, el Ministerio?
Por ejemplo: ¿A quien responde Comunales? ¿Quién nombra al Jefe de Comunales en cada municipio? ¿Cómo se forma el presupuesto de Comunales? ¿Qué control tienen los ciudadanos, las comunidades, sobre la actividad de Comunales? ¿Es Comunales autosuficiente, se autogestiona? ¿Pudiera Comunales organizar mejor la poda de arboles, la recogida de basura y reciclaje materias primas? ¿Hay relaciones monetarias entre Comunales y Materias Primas; entre Materias Primas y sus consumidores? ¿Cómo se determinan los ingresos de los trabajadores de Comunales y de Materias Primas? ¿Podrían organizarse en cooperativas independientes los trabajadores que se benefician de la basura para ser más eficiente y humano su trabajo?
Algunos decían que los trabajadores cubanos eran holgazanes, pero cuando se abrieron nuevas posibilidades al trabajo por cuenta propia, la gran mayoría de los que se inscribieron eran desvinculados laboralmente, lo que demuestra que no eran vagos que rechazaban trabajar, sino que no estaban dispuestos a laborar por bajos salarios, para el estado. El cubano sí es trabajador, lo ha demostrado en todos los rincones del mundo a donde ha ido a parar. Lo que no le gusta al cubano es ser explotado por nadie.
En EE.UU. hay casi dos millones de cubanos. ¿Alguien sabe que los cubanos tienen 200 mil negocios propios en ese país y que junto a los judíos son el grupo nacional que tiene más negocios per cápita, incluidos los norteamericanos de origen? ¿Alguien sabe que la gran mayoría de los cubanos que se van a ese y a otros países, tratan de tener su negocio propio, aunque pequeño?
Nuestra experiencia nos ha demostrado que es mejor la autogestión, la autosuficiencia económica, el autofinanciamiento, el cuentapropismo. Simple: no nos gusta que nos exploten. Tenemos un pensamiento económico-social de avanzada, que debemos a la historia libertaria cubana y que el estatalismo, sus dogmas y sus monopolios, en nombre del “socialismo”, impiden desplegar. Aquí, ni una ley de cooperativas urbanas tenemos todavía y el gobierno revolucionario acabó en los primeros años con todas las formas cooperativas, mutuales, cajas de retiro, asociaciones de socorro y otras que habían formado los trabajadores independientes en la neo-colonia: “eran fórmulas anarquistas que confrontaban al estado revolucionario”.
Y sépase que, en el fondo, se trata también de un pensamiento libertario y contestatario que nos viene de las muchas guerras y luchas de los cubanos a través de toda la historia, desde que los españoles desembarcaron en el archipiélago y los hacendados criollos y traficantes internacionales de esclavos introdujeron en Cuba a los esclavos traídos de África, que venían ya sublevados desde que eran capturados con ese fin. No venían con grilletes por mansos, sino por amantes de la libertad.
La esclavitud de látigo y grilletes, luego de las guerras de independencia, se transformó en asalariada y los negros, que pasaron de los barracones a las filas del ejército mambí, luego fueron a parar a los solares y casuchas “que les tocaban” como asalariados. La historia libertaria contra la esclavitud está por contar, pues la historia-cultura burguesa blanca escrita necesitó priorizar las luchas por la “independencia nacional”, como parte de la trama para justificar y acendrar su dominación posterior.
Los analistas y encargados oficiales de tratar estos asuntos y los que se han abrogado el “derecho” de ser ellos los que resuelvan los “problemas del pueblo”, en lugar de dar participación a todos los ciudadanos en todas las decisiones que les conciernen, deberían hurgar más profundamente en estos asuntos y quizás detecten la indignación que corre por las venas de los cubanos de a pie, los desposeídos, quienes no disponen de capacidad propia para generar recursos y resolver sus problemas más perentorios, más allá de emplear, vender o alquilar su fuerza de trabajo y depender de un salario o una pensión miserable para vivir. En cierta forma se trata de una sublevación silenciosa de los inconformes por muchas razones. Pues las quejas ante el delegado, en un escrito a la prensa, a un órgano de poder, mayoritariamente reciben por respuesta la callada o justificaciones insólitas.
-¿Por qué en lugar de quejarse, no se acogen al decreto 259 y piden un pedazo de tierra para trabajar?
-¿Con 60 años o más, sin tradición campesina ni recursos, sin posibilidades de fabricar allí para hacer estancia y cuidar los frutos, sin la seguridad de que después de labrar la tierra 10 años, te puedas quedar con ella, sin libertad plena para sembrar y vender la cosecha, sin facilidades para recibir ayuda efectiva, en competencia con campesinos adinerados, dueños de tractores y camiones, que explotan asalariados? No fastidie compay.
¿Alguien se ha preguntado qué relación existe entre la indisciplina social y el tipo de democracia indirecta y representativa que tenemos, donde todo lo deciden unos representantes propuestos siempre desde arriba, salvo en los barrios donde los delegados son solo tramitadores de quejas y “respuestas” a las quejas? Nada que ver con la democracia directa y participativa, que correspondería al socialismo, donde los de abajo propondrían y elegirían todos los cargos públicos, que serían revocables y limitados en tiempo, donde sean los ciudadanos los que decidan directamente sobre los problemas, presupuestos y las leyes que los afectan.
¿Qué tiene que ver la llamada indisciplina social, con la legislación vigente, con la limitación a las libertades y derechos cívicos de los cubanos, cualesquiera que sean las razones que se aducen?
Seguiremos con problemas de “indisciplina social”:
-mientras el poder real, el de la economía y el de las decisiones sobre todos los aspectos importantes de la vida, no esté democráticamente en manos directas de los trabajadores y el pueblo y todo sea decidido desde un órgano central por “revolucionarios profesionales”.
-mientras sea una burocracia designada desde arriba la que controle los recursos y decida qué hacer con ellos y no los colectivos laborales y sociales en cada centro de producción o servicios, en cada barrio, comunidad, municipio y en toda la nación;
-mientras no tengamos los presupuestos participativos en todos los niveles aprobados democráticamente por referendos;
-mientras sigamos con el trabajo asalariado para el estado y no sean los colectivos laborares organizados para decidir en cada centro de producción o servicios, quiénes deben ser lo encargados de ejecutar los planes aprobados por ellos, como gestionar democráticamente la producción y disponer para la repartición equitativa de un tercio de las utilidades, descontado un tercio para la reproducción ampliada del centro y el otro para la contribución a los gastos sociales nacionales, municipales y comunales, sabiendo con exactitud su destino.
-mientras no sea el pueblo el que proponga y elija directamente a los funcionarios públicos a todos los niveles, encargados de llevar adelante, de ejecutar, los planes aprobados por ellos en las Asambleas correspondientes.
-mientras el modelo estatalista asalariado centralizado y políticamente autoritario, siga vigente.
-mientras las libertades y derechos ciudadanos sigan limitados.
La sociedad no será disciplinada por ninguna policía, por ningún cuerpo de leyes, por ningún código de conducta que no sean la policía, las leyes y el código de conducta que ella decida libre, democrática y soberanamente, sin imposiciones de ningún tipo.
El autoritarismo, el ordeno y mando, el “mandonismo” lo denominó el Presidente Raúl Castro, los juicios, los castigos, la represión en fin, nunca han resuelto los problemas sociales. Estos tienen sus causas sistémicas. Es ahí a donde hay que ir a buscar sus soluciones.
De una vez: resolver el problema de las indisciplinas sociales, implica dejar atrás el capitalismo de estado actual que subyace en el “socialismo de estado” y su “dictadura del proletariado”, y avanzar en un programa verdaderamente socialista, democrático, participativo, “con todos y para el bien de todos”.
Socialismo por la vida.
La Habana, 15 de febrero de 2012
Vea mi página en kaosenlared.net. En el viejo formato: http://www.kaosenlared.net/colaboradores/pedrocampos
En el nuevo formato:
www.kaosenlared.net/colaboradores/.../88-pedrocampos.html
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Los fondos del gobierno son tuyos
Por Ramón García Guerra.
La gente no hace cuentas de cómo emplea el gobierno el dinero de todos en este país. Pensadlo mejor: Somos una sociedad de trabajadores que confía la administración de sus recursos al gobierno.
Pregúntense por qué rinde cuentas el delegado ante los electores en asamblea de tiempo en tiempo.
Tómese en serio el informe que rinde el delegado en dicha reunión. Díganos qué pudo sacar en limpio del mismo. ¿Cuándo fue puesto a discusión en la comunidad el proyecto de ampliación del servicio telefónico que realiza ETECSA, por ejemplo? Después esta empresa ha dejado las calles destrozadas y no hay manera de reclamar que las reparen.
Deberíamos debatir cada proyecto de intervención en la comunidad antes de ser realizado.
Para una ciudad pequeña como la nuestra (24,000 habitantes): ¿cuántos comercios --y qué tipo y variedad de ellos-- deben de ser creados en el barrio? ¿Cuáles serían las formas que deberían de adoptar los mismos? ¿Acaso no sería necesario crear fondos fiduciarios: para apoyar a inversores o asistir a desvalidos en la comunidad, siendo estos administrados por los vecinos?
Como el dinero del presupuesto del Estado es sudor del pueblo trabajador hecho gasto público, advierto, todos estamos en el derecho a exigir a las autoridades por el empleo de estos recursos.
Primero hemos de exigir a dichas autoridades que los presupuestos de las escuelas puedan ser administrados por éstas y que los consejos de padres sean autorizados a decidir qué hacer con aquellos.
Después sería posible que discutamos la calidad del servicio: educación, salud, recreación, etcétera.
Quien se gana la vida trabajando para el Estado, o se autoemplea, está haciendo un aporte a la sociedad. Pero no sólo estos tendrían el derecho a recibir los beneficios de un modelo fraternal de vida colectiva, pues todos son partes del proceso de reproducción ético-social que sostiene a la sociedad: como aquel abuelito que cultivó una familia o esta ama de casa que hace hoy mismo por todos.
Debemos de celebrar esta anónima participación en la vida cotidiana de la sociedad.
Regresemos al derecho consuetudinario de los antiguos. Quizá sea necesario para forjar autoridades en redes: heterarquías, que logren deshacer la tiranía sin tiranos que padecemos en Cuba hoy mismo. Estado de cosas, además, que resulta del carácter contingente de dicha tiranía. Tiranía que pudo ser ejercida por unos u otros durante cinco décadas.
Retomar no es refugiarse en el pasado: imaginarios, mentalidades, moralidades, etcétera; sino, más bien, será poner en perspectiva la vida de todos. Pero, sobre todo, será anticipar el salto al futuro.
Existe un montón de mecanismos ético-sociales de regulación de la sociedad (morales, legales, ideológicos, culturales, etcétera) que son ajenos al capitalismo y que parten de las exigencias que plantea aquel proceso de reproducción de la misma y que la sostienen en el tiempo.
Ahora todo nos parece obsoleto y debe cambiar a saltos.
Correcto.
Después de la pregunta: ¿qué hacer?, hagamos otras preguntas: ¿quién, cuándo y cómo?
“Escribid sin faltas de geografía”… en materia de política.
Cuando un modelo de sociedad ha agotado su ciclo histórico, entonces, también la forma institucional que hacía operativo al sistema acabará siendo disfuncional. Enfrentados a este dilema, acaso, ¿tiene sentido contar con bridas lujosas y firmes cuando la bestia yace moribunda y agoniza echada sobre el pasto?
Estamos ante un jinete que se resiste a admitir la muerte de la bestia.
Un amigo mío ha estado haciendo mil veces la misma pregunta sobre el tipo de dominación política que necesita un proceso de transición hacia el socialismo: sistema que supone la entrada al reino de la libertad. El miedo que siente él de acabar en un intento de fuga, --siendo todos reconducidos al punto de partida-- ahora se enfrenta al mismo, que apuesta por una sociedad de iguales entre cubanos. Nosotros, en cambio, hemos sido opuestos a adoptar cualquier sistema de dominación pues creemos que ninguno nos conduciría a al paraíso en la tierra.
Los sistemas de dominación política sólo producen estados de opresión y actitudes de rebeldía.
¿Cuál sería el orden justo?
Estamos por la disciplina del proceso. Exigiría esta rearticular las relaciones entre Estado y sociedad. Haciendo del Estado un facilitador de la vida colectiva, y de la sociedad: una entidad autónoma en ejercicio de toda la libertad.
Pensamos en catalizar el proceso.
Esto nos obligaría a regresar al Che Guevara.
Creciendo como un alud de nieve, --según el Che-- todo grupo de vanguardia debe hacer que “el hombre adquiera la total conciencia de su ser social” y, asimismo, dotar a la sociedad de las formas institucionales que asistan a esas “multitudes que marchan hacia el futuro”.
La batalla por la continuidad del socialismo en Cuba estará siendo planteada en esta manera.
¿Acaso ha sido esta la alternativa que adopta el Partido?
La sociedad del ser que alguna vez resultó el contenido del proyecto (años 60s): acabó siendo convertida en las sociedad del tener (años 80s) y ahora se presenta como la sociedad de lo aparente (siglo XXI).
[Cultura del simulacro, diría Jean Baudrillard; o sociedad del espectáculo, según Guy Debord.]
Después de la clausura de la Conferencia del Partido fue puesto en televisión un material publicitario sobre la inversión del puerto de contenedores en el Mariel. Información esta que ha creado unas expectativas muy positivas con respecto al proyecto de desarrollo que nos ha ofrecido el PC cubano.
La política de Estado que distingue entre economía estratégica y economía ordinaria, tiene previsto que los ingresos que generen dicho proyecto sean empleados en otros proyectos de desarrollo que acaben finalmente por superar la condición de subdesarrollo que padece la sociedad en la actualidad. Mientras tanto, queda liberado el Estado de la engorrosa tarea de administrar la vida cotidiana de los cubanos, que desde ahora deben de ocuparse de gestionar esta última por sí mismos.
Parece todo un asunto de sentido común.
Cuando se debatió aquel proyecto de construir campos de golf, escribí un artículo (Estatismo vs. Autonomía) que objetaba el hecho de instalar esos enclaves en una sociedad sin ‘sistema inmunológico’ para resistir el embate del capital transnacional: dada la baja densidad social de las sociedades locales que serían expuesta al mismo.
Pienso en el destino de los pobladores de Punta Las Coloradas en Pinar del Rio, por ejemplo. Empleados todos de la nueva Caimanera. Los dueños de la Base Naval serían también los dueños de sus vidas.
Pero hay más.
Las nuevas industrias autistas que estarían instalándose en Cuba escaparían al control popular. Porque no fue el pueblo el que contrajo la deuda en la década de 1970, pero es éste quien está pagando aún esa deuda ilegitima.
Cuando a estas industrias autistas llegue la democracia de los obreros, entonces, como en los actuales núcleos del Partido, sólo podrán éstos debatir su Plan Técnico-Económico: es decir, un punto de la geografía del país. Esperando en el otro extremo del largo laberinto de dicha democracia representativa se hallará a estos trabajadores que recibirá la noticia después de pasar por nueve filtros administrativos antes de llegar a éstos: no hay fondos.
Estaremos tan ocupados en la gestión de las alcaldías que miraremos los manejos del Gobierno central a la distancia y todas las culpas recaerán sobre el que está delante.
Las reformas están remozando el sistema de dominación política hoy existente.
Todo bajo la ambigüedad de una frase: “Cambiar todo lo que debe ser cambiado”, que resulta hoy mismo la palabra de orden en Cuba.
Insisto, las reformas que lleva adelante el PC cubano, junto al modelo económico que tratan de cambiar, buscan también la actualización del sistema de dominación política de la sociedad. ¿Cómo está siendo conservado el control de esta ultima?
El sistema de dominación vigente está fundado en la adopción de políticas selectivas por sectores sociales, con un empleo mañoso de la información a través de filtros culturales y con una dotación de anclajes económicos en la comunidad que secuestra o nos distancia de la soberanía popular.
Digamos qué este sistema de dominación resultó del intento de buscar una solución ante el modelo neocolonial que padeció la sociedad cubana en la primera mitad del siglo XX. Pasemos por alto esa discusión. Imaginemos que no estamos en el punto de partida. Preguntémonos: ¿El nuevo sistema que tratan de implantar hoy nos traerá de vueltas la soberanía que confiscaron al pueblo los lebreles del status quo? ¿Harán una reforma a la Constitución para incluir el derecho a decidir qué prioridades serán adoptadas en el plan de la economía nacional del año 2013?
El dinero que maneja el gobierno es nuestro.
¿Quién les dijo a los expertos que saben más de economía que este pueblo que salvó a la nación en la década de 1990?
Déjense de hacer cuentecitos a mi gente, tartufos.
Santa Fe: 6 de febrero de 2012.
E-mail: ramon0260@gmail.com
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Trabajo educativo de la Coordinadora Centroamericana de Autogestión y Vivienda Solidaria Febrero 2012 (Boletín No 77)
Estimadas y estimados lectores,
Es con sumo placer que en la primera entrega de este año, los invitamos a utilizar de la mejor forma posible, el importante esfuerzo educativo realizado por la COCEAVIS (Coordinadora Centroamericana de Autogestión y Vivienda Solidaria).
Felicitamos a COCEAVIS desde el Programa Regional de Vivienda y Hábitat, basándonos en las palabras de la lideresa Fanny Jirón de Nicaragua quien, al surgimiento de la idea, expresó:
“Sin la debida formación de nuestra gente somos frágiles. Se trata de volcar todos los esfuerzos en capacitarnos, para que cada compañero cooperativista sea un combatiente consciente de la tarea emprendida. Los desafíos son muy grandes, pero seguro triunfaremos si nuestras ideas están claras”.
Cabe destacar que han participado en este esfuerzo, compañeras y compañeros de distintos países: El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Uruguay.
En el caso de este último, se suma al esfuerzo de COCEAVIS pues es en este país donde nace el modelo cooperativo que se impulsa en los demás países, adaptándolo a las distintas realidades, pero manteniendo la base fundamental que lo sustenta
Los temas son abordados por distintas compañeras y compañeros que trabajan el tema, muy ligados a las organizaciones urbanas populares, lo que permite desarrollar con profundidad, en base a una práctica de años, temas tales como:
• El modelo cooperativo autogestionario y sus ejes centrales
• La importancia de la financiación estatal
• Los marcos legales
En definitiva, cada uno de los videos apunta a seguir fortaleciendo la idea de la lucha por la vivienda como derecho humano y no como mercancía.
Los mismos son de corta duración a los efectos de actuar como disparadores de reflexiones y debates por parte de las organizaciones que así lo deseen. Se recomienda para la utilización de los videos en talleres formativos, comenzar con los videos de Uruguay, en particular los “Ejes Centrales del Programa Regional de Vivienda y Hábitat”. Al entrar en nuestro canal en YouTube, podrán ver los videos que abordan la problemática de la vivienda popular. También existen instrucciones para cómo ver y buscar los videos, haga clic aqui para bajarlas desde la página Web del SCC.
Esperamos en el transcurso del 2012, sumar a la videoteca a los países del sur, a los efectos de tener una mayor visión del Continente; ya estamos caminando en ese rumbo.
Gustavo Gonzalez, coordinador del Programa Regional de Vivienda y Hábitat.
Coordinador del Programa Regional de Vivienda y Hábitat
Centro Cooperativo Sueco
Programa de Vivienda & Hábitat del SCC (Centro Cooperativo Sueco)
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Asumir las discrepancias con naturalidad y respeto
Crónicas cubanas
Félix Sautié Mederos
Desde el punto de vista del realismo político, es honrado reconocer que el Presidente Raúl Castro Ruz, en su clausura de la Primera Conferencia Nacional del PCC, planteó algunos conceptos básicos sobre la necesidad de “promover la mayor democracia en nuestra sociedad” a los cuales ya me he referido anteriormente, pero creo de utilidad que continúe comentándolos. Considero que su concepción integral y puesta en práctica podría generar sinergias positivas en todos los sectores de la población, porque en lo individual y en lo colectivo, vivimos con muchas carencias y contradicciones al respecto. En consecuencia, apoyo y saludo que en definitiva con hechos concretos estos propósitos se conviertan en una realidad cotidiana y no queden solo en las palabras.
Por otra parte recuerdo, parafraseando a Rosa Luxemburgo, que la libertad es para todos o no es; y, opino que coadyuvaría a la consecución práctica de ese concepto, la más efectiva implementación de lo planteado por el Presidente en su discurso, de favorecer que “las discrepancias sean asumidas con naturalidad y respeto incluyendo a los medios de comunicación masiva” así como que “la conformación de una sociedad más democrática contribuirá también a superar actitudes simuladoras y oportunistas surgidas al amparo de la falsa unanimidad y el formalismo en el tratamiento de diferentes situaciones de la vida nacional”; y, que “Es preciso acostumbrarnos todos a decirnos las verdades de frente, mirándonos a los ojos, discrepar y discutir, incluso discrepar de lo que digan los jefes cuando consideramos que nos asiste la razón (…) “Hay que estar dispuestos a buscarnos problemas defendiendo nuestras ideas y enfrentando con firmeza lo mal hecho…”. No continúo pues sería muy extenso continuar citando el discurso que, en mi opinión, vale la pena estudiarlo.
Por otra parte, en las complejas y difíciles circunstancias que estamos viviendo en Cuba y en el mundo, una democratización y socialización de amplio espectro lejos de debilitar al país, sería en cambio un fortalecimiento esencial de la Nación Cubana que, en su conjunto incluye a la diáspora que algunos insisten en negarles sus derechos de cubanos. Así mismo como parte de esas concepciones proclamadas, propiciar el diálogo, el reencuentro y la reconciliación serían pasos históricos y trascendentales para la concordia, la paz y el desarrollo del país. Pero lamentablemente hay quienes desde diversos signos e incluso posiciones encontradas, desestiman asumir las discrepancias con naturalidad y respeto e insisten en agudizar la polarización, los rencores, los odios, las amenazas, las violencias y las represiones que nada bueno podrían aportar para Cuba. En esta dirección son tristes y muy injustos, los procedimientos de descalificación y amenazas, vengan de donde vengan, de quienes coincidentemente e incluso desde posiciones algunas veces encontradas rechazan participar en un diálogo profundo y público en igualdad de condiciones y derechos, del cual no se desprendan consecuencias de fuerza en contra de cualquier opinión diferente.
Estas actitudes controvertidas, niegan de hecho los reiterados planteamientos, definiciones y llamados a favor del humanismo y de la ética sin jamás decir mentiras. En este orden de cosas, opino que quienes utilizan el insulto, las descalificaciones y las amenazas contra los que piensen diferente, en realidad carecen de argumentos y de convicciones para razonar y convencer y acuden al uso de la fuerza como recurso en lo que se podría denominar un vale todo.
Los que así actúan escudados por demás algunas veces en seudónimos insospechables, precisamente por su incógnita ocultada, dejan sus planteamientos y acciones pretendidas o realizadas en el campo de las dudas no comprobables, en tanto que la “piedra” ya queda lanzada sobre quien pretenden advertir y/o amenazar. También en ocasiones son secundados por personas orgánicas y controvertidas que promueven debates extemporáneos y provocadores que dividen, sacan los análisis del plano de las ideas y los dirigen contra las personas que atacan y denigran, desvían la atención de los problemas fundamentales del momento que vivimos y desvirtúan las posibilidades de promover el reencuentro, la reconciliación y el diálogo fecundo entre cubanos.
Con esos métodos demostrativos de su falta de sensibilidad ética y/o incultura, solo podrían atemorizar a los timoratos, pero a quien con convicciones haya vivido y luchado sostenidamente en pro de la equidad distributiva, la justicia social y la paz desde posiciones de izquierda reconociendo incluso sus propios errores; y, esté dispuesto a buscarse problemas hasta las últimas consecuencias, pocos efectos le harán. En este orden de cosas, debo reiterar que no me oculto para proclamar de frente y con la mirada sostenida mis convicciones cristianas a favor de un socialismo participativo y democrático, que se aparte de las concepciones estalinistas y del capitalismo de Estado que propician la explotación salarial sin entender ni aplicar el concepto de trabajador asociado que definiera Carlos Marx. En cambio, opino que ser un “mercenario al servicio del Imperialismo” (que es una muy utilizada descalificación) es también entre otras cosas dedicarse a dividir, amenazar y emplear la fuerza para imponer criterios. Si las concepciones que planteo a favor de un socialismo por la vida, “traicionan a la Revolución”, tal y como algunos dicen en sus mensajes anónimos, el problema es que los que envían tales advertencias y amenazas son los que en definitiva desconocen y niegan los principios de la utopía socialista nunca alcanzada hasta nuestros días.
Esos procedimientos, contradicen el espíritu y la letra de lo planteado por el Presidente Raúl Castro de “promover la mayor democracia en nuestra sociedad”. Controvertidamente, crean por tanto, una gran confusión de conceptos; y en mi criterio, podrían dar base y argumentos para estimular las agresiones e intervenciones externas con propósitos anexionistas. Me pregunto entonces: ¿Quiénes están verdaderamente “al servicio del Imperialismo”? Así lo pienso, así lo afirmo y así respondo.
E-Mail: fsautie@yahoo.com
Por Esto!, lunes 20 de febrero del 2012
http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=22&idTitulo=149003
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SOMBRA DE LA LUZ
Por Félix Guerra
La palabra poética, depurada
de altivez, será ángel oscuro. Sombra y transparencia, milagro del trasiego, del extremo
al exceso, sin perder nitidez. Ni asombros. Ni comisuras ni mesuras. Nadie duerme, las bocas se persiguen, las piernas se sujetan
del cuello.
Asalto de ternura paraliza obligaciones. Excesos se impiden a mano: sudor y contención. Verso no es vocación de gobierno o Estado,
ni mueve hilos de poder, ni su voz va a ser oída
en tribunas ni magnificada por altavoces,
ni repetida por el huracán de los medios informativos, ENTONCES deberá portar fuego,
incluso impedidos o prohibidos. Incluso jugar cabeza al poli que no tiene cabeza.
Yo me quedo a morir colgado de tu saliva.
Mi drama de hoy será otro bajo el sol.
Solo se duerme a la luz. Badajos se deshacen en vapores.
Palabra aprenderá a ser subterránea,
A trasegar albañales, de igual manera pasearía al galope en los hospitales o palacios
de caballería.
Al demiurgo, sopa de demiurgo, a la sabana- caballería, bandera desplegada al aire.
Al son del río bailan pastores, música
de floresta danza el paisaje. Viento nos enciende como lámparas jugosas que queman ebriedad a las estrellas.
Otros vienen, y a fuerza de irnos al pasado regresamos para ser olvido.
A mí no me sucede todo, le sucede a todos. Gramática necia, inhóspitos adjetivos,
verbos acorralados, y por tanto palabras, poéticas o históricas, en trances de dramaturgias insospechadas
aprenderán a arder y a vivir el fuego, carbonizar y arrastrar como cenizas, a subsistir
en el viento.
Solo las palabras, de cuanto somos, nos pertenecen: solo de ellas podemos retractarnos o afianzarnos. Palabra no reducida a antología o declamaciones. O fama de antaño: la gloria del rebaño se hace hoy pan y trigo
que sube las cuestas provinciales.
Descubrimos portales, desenterramos ventana. Portamos cielo, agricultura, industria. Damos de beber del aguacero,
en silencio y melodía. Repartimos neblinas
sin caldo, rocío fantasmal.
Esa fuerza es poder agreste y persuasivo:
en primera instancia la palabra deshace ínfula/ aristocrática, ambición/marfil, desdén/esquivas.
Querubín o diablo, sin más pandillas que amor individual y amor social. Territorio
que llega a las esquinas, dulzura sin calambres mecánicos. Sombra de la luz. Tecnología
de la sangre y la razón. Bando de la imaginación operando, con o sin beneplácito,
en callejones y avenidas de la humanidad.
Poemas de la sangre cotidiana.
Regla, febrero de 2012
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