¿No hubo intento de golpe? ¿Sólo se trató de fugar a López? ¡Curioso no!
Eligio Damas
Una constituyente con una ya larga hoja de servicios dentro del chavismo, ha dicho que el propósito de lo acontecido este martes 30 de abril fue favorecer la fuga de Leopoldo López hacia la embajada de Chile.
“La única libertad que le interesaba era la de Leopoldo López que a esta hora está junto a la embajada de Chile.” Eso dijo la constituyente.
En Telesur, otro personaje ligado al gobierno, también el martes por la noche, se hizo eco de la misma narrativa, por lo que uno pudiera pensar que se trata ya de la explicación que algún sector del gobierno intenta oficializar sobre los acontecimientos. Entonces no hubo golpe, sino un acto distractivo y es una manera fácil y convencional de explicar lo acontecido que obedece más a lo visceral que a la razón. En efecto, el personaje citado también dijo: “Engañan (la oposición) nuevamente a sus seguidores, genera frustración, lo llevan bajo engaños a una agenda violenta para justificar la salida de Leopoldo López.”https://lanacionweb.com/nacional/tania-diaz-la-unica-libertad-que-les-interesaba-era-la-de-leopoldo-lopez/
Pero la oposición, primordialmente interesada en quedar bien después de tan rotundo fracaso y descomunal error, también hace esfuerzos por construir una historia que le deje bien parada y para esto se aferra ahora a la que les brinda John Bolton. En efecto, desde ya se nota la actitud acrítica frente a un eslabón más de una larga cadena de disparates de los más grandes en la historia de la política venezolana de los últimos tiempos, para quedar bien ante sus seguidores, por lo que puso a correr John Bolton, Asesor de Seguridad de la Casa Blanca, @AmbJohnBolton, quien aseguró que “@vladimirpadrino, @MaikelMorenoTSJ y el jefe de seguridad presidencial, están de acuerdo en que Nicolás Maduro debe irse y "deberán actuar esta tarde o en la noche". https://puntodecorte.com/jhon-bolton-regimen-maduro/.
Como podrá entenderse al leer lo que fue un twitter de Bolton, que parece intentar crear confusión, alentar a los golpistas y generar reacción a ellos favorable en la población y hasta desmoralización entre la gente del gobierno en el instante mismo que se desarrollaban los acontecimientos. Y de esto, después de consumado el disparate, de aquello ha salido una curiosa narrativa sobre los hechos para intentar llenar de incertidumbre lo que pudiera estar claro y hasta generar consuelo. Pero en esto, el cuento de la Constituyente le sirve de aderezo al opositor para tapar su injustificado error y hasta llenar como de heroísmo aquello. Tanto que abundan los mensajes en los cuales se reivindica la fuga de López como logro importante de lo sucedido.
Pero la verdad pudiera ser otra. Carmona Estanga, después del golpe de abril del 2002, se fugó tranquilamente y nadie se preocupó por ello. Los hechos demostraron que esa opción era la que mejor le convenía al gobierno. Hubiese resultado más incómodo para éste, tener al golpista en su casa en Caracas o en una prisión, como una referencia política inmediata, a un salto de mata, que dejarle ir a Colombia donde lleva casi 20 años sin causar molestia alguna. La oposición tiene un número elevado de dirigentes suyos en el exterior que, salvo haber lobby en distintos espacios y quizás gestionar recursos, nada significativo hacen para incomodar al gobierno de Venezuela. Ya López no será un “preso político” del gobierno y perderá su halo glorioso a menos que le demos valor a la ilusa explicación de la Constituyente.
No creo, por lo dicho y distintas experiencias, que a López le fuese imposible fugarse de su casa, donde estaba recluido cumpliendo su condena, para dirigirse a una embajada; como tampoco creo que para lograr ese insignificante propósito, la oposición optase por desmontar la acción que llamaron “liberadora”, planificada para el 1° de mayo, que tenía como fin movilizar enormes masas para tumbar al gobierno. Como no creo que para eso optasen por sacrificar al grupo de militares, que por muy insignificante que fuese, es como muy elevado para el propósito que se perseguía, de ser cierto que sólo se trataba de favorecer la fuga de López. Tampoco creo que “la inteligencia gringa”, demasiado ducha en esos menesteres, tuviese necesidad de hacer tanta fanfarria y bulla, “quemar” tantos recursos, para decirlo en el argot del oficio, para pasar a López de su casa a una embajada. Creer eso sería ofender el prestigio alcanzado por las fuerzas especiales del país del norte. Sin olvidar que no sólo se trató de fanfarria y bulla, sino de tumbar todo un plan político subversivo preparado de antemano para alcanzar un propósito poco sustantivo.
Si el fin hubiese sido que López se fugase hacia una embajada no era necesario un movimiento de esa magnitud, menos exhibirle entre los alzados y eso bien lo sabe cualquiera. Ayer mismo, según las informaciones de prensa, López se trasladó de los lados de Altamira donde se desarrollaron los hechos por todos llamados subversivos, hacia la embajada de Chile sin inconveniente alguno y más tarde de allí a la española. ¡Estamos en Venezuela! Y subrayo, lo hizo con la misma tranquilidad de Carmona Estanga y sin que el gobierno diese muestra de alguna contrariedad.
Si alguien salió favorecido con la salida de López de su casa, convirtiéndose de detenido y sentenciado en prófugo, es el gobierno de Venezuela, si vemos el asunto desde la perspectiva política estrictamente hablando. Quizás, muy pronto, los hechos confirmen esta apreciación.
Por lo anterior, la explicación de la Constituyente, por simplista, favorece el discurso y las intenciones de la oposición radical que intenta convertir lo que fue una derrota auto infligida en un rotundo triunfo representado en el “escape” de López. Es como una historia que haría de López un personaje más allá de lo que en realidad es. Y haría de un fracaso rotundo una “brillante” victoria.
A ese asunto se agrega lo relacionado con Jhon Bolton. Si bien el “Jefe de Seguridad de la Casa Blanca”, dijo aquello en el transcurso de los acontecimientos, la oposición responsable de lo acontecido pretende usarlo como recurso para disfrazar de triunfo lo que fue una gigantesca y aplastante derrota y hasta avisada. Junto a la versión de la Constituyente corre la opositora según la cual “factores del gobierno y del mundo militar, como Padrino López andan en negociaciones para deshacerse de Maduro”. Lo que más tarde corroboró Guaidó, como que en el diario Panorama, un redactor aseguró que aquél dijo: “Maduro ya no controlaba el país y llamó a los venezolanos a tomar las calles”. "Hay soldados dispuestos a defender la Constitución, y quedan muchos más".
Más recientemente, se sumó al coro Elliot Abrams, quien dijo “Me he encontrado con que muchos de ellos han apagado sus celulares.”https://www.aporrea.org/tiburon/n341447.html
Esto lo exhiben como resultados de las acciones del 30 de abril. Es como un intento de convertir una derrota descomunal, un gesto hasta infantil, que no se le puede explicar a los suyos, en un triunfo, como que “logramos la fuga de López y creamos un enorme cisma en el gobierno”. Y no se dio el golpe porque los comprometidos se echaron para atrás.
Pocas horas después de fracasada la intentona de Caracas, Mike Pompeo, ha dicho que: “Una acción militar es posible. De ser ello necesario, eso es lo que Estados Unidos hará.”
A buen entendedor pocas palabras. Para Pompeo está claro lo que sostuvimos en nuestro artículo anterior, que de ahora en adelante, entre los planes de EEUU está el de cambiar de planes, como que Guaidó y López ya estorban y llegaron a la obsolescencia. Quizás, por ahora, tampoco sea el momento de eso que recrea Pompeo, lo de la acción armada, por las dificultades que han hallado para ello, que ahora parecen aumentar, pero si el de manejar otras opciones de las tantas que están sobre la mesa, que además sean menos costosas y no sea necesario seguir con figuras que poco arriman para el mingo. Pero la oposición radical al gobierno, foránea e interna, de hecho admite lo del golpe, quien no parece ser alguna gente del gobierno, como la Constituyente. Amanecerá y veremos.
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