EL GRAN FRAUDE

Eligio Damas Nota: Este artículo fue escrito y publicado en 1995, eran los tiempos del gobierno del Dr. Caldera. Como le percibo referencia importante para juzgar como era el país en aquella época y bueno para orientar a quienes creen el mundo se acaba, he optado por reponerle aquí. Pero también para que no quede en el olvido. De esa manera, sin ocultamientos ni temores, calificó el Ministro Cárdenas a nuestro sistema educativo. Creo que en este país, que es como la isla de Jauja al revés, es difícil encontrar el mayor fraude. Porque, es precisamente entre nosotros donde se acumulan los mayores y más escandalosos. Justamente ayer, en Barquisimeto, un grupo de osados asaltantes se llevó aproximadamente UN MIL DOSCIENTOS MILLONES DE BOLIVARES, un equivalente aproximado a SEIS MILLONES Y MEDIO DE DOLARES. ¡Eso es un escándalo, aquí y en cualquier parte! Sin embargo, esos arriesgados delincuentes pronto caerán, si no cayeron ya. Y seguro que a la cárcel irán. Y hasta protagonizarán otro fraude escandaloso, cuando un juez, accidental o no, los declare libre de toda culpa. Pero es mucho más escandaloso y hasta más publicitado, el fraude de los banqueros. Pues cada uno de estos, por lo menos los capos, se llevaron cifras superiores a la ya mencionada, sin jugarse el pellejo, sin esconderse en una selva, como la yaracuyana donde tanto abundan serpientes y felinos. Al contrario, por Maiquetía y La Carlota salieron orondos y en Miami y Madrid recalaron. Por estas cosas resabidas, parece un tanto exagerado el Ministro Cárdenas al calificar a la educación como en gran fraude. Si se trata de hacer una comparación entre los resultados o productos del sistema y los recursos que el él se invierten, en verdad se podría afirmar que, en gran medida los hemos malbaratado. Es cuantiosa la inversión en el sector educativo y muy deficiente, por decir lo menos, sus resultados. Antonio Luis Cárdenas Pero si uno hace un ligero balance de la historia del fraude en Venezuela, acopiará recuerdos como éstos: Recadi acabó con las reservas del tesoro y, lo que es peor, por ese gigantesco fraude sólo fue preso un chinito, a quien condecoraron con la orden del "Gran Pendejo Nacional". La deuda externa, de la cual sólo se sabe que se debe, fue un fraude descomunal. Nadie conoce quién la contrajo, dónde se invirtieron esos reales y por ningún lado se observa los beneficios que ella debió dejar. Por la deuda ilegal a irresponsablemente contraída solamente acusaron al catire Mariani. Pero éste murió y, ¡muerto el perro se acabó la rabia¡ Ya nadie se acuerda de Gumersindo y los disparatados proyectos de "la gran Venezuela". Como nadie se acuerda de la disparatada política monetaria de Luis Herrera, quien bajo el sopor de una siesta matutina, reaccionó cuando ya no quedaba ni el raspado de la olla. Y a su manera, estas cosas fueron fraudes. Y la lista es larga y uno no puede mencionar cada uno porque no habría espacio ni tiempo necesarios. Pero....¿y el paquete de CAP? ¿. Acaso no fue eso otro gran fraude. “ ¿ Y por qué al hablar de fraudes, de crisis y hecatombes financieras, nadie se acuerda de Pedro Tinoco ?. ¿No cree usted mi querido y admirado ministro que bueno es culantro pero no tanto? -- Publicado por Eligio Damas para BLOG DE ELIGIO DAMAS el 9/30/2013 10:56:00 a.m.