CRÓNICAS CUBANAS,
Por Félix Sautié Mederos.
Aunque estaba trabajando en una crónica dedicada exclusivamente a
expresar la crisis de funcionamiento en que se desenvuelven las pocas
conexiones legales de INTERNET que algunos tenemos en nuestras casas,
en mi caso como Prensa Extranjera, en ese intermedio de tiempo me
llegó una convocatoria de la sección “En diálogo" de la Revista
Espacio Laical invitándome a participar en un encuentro de reflexión y
debate sobre; y cito textualmente: “una cuestión esencial para la
proyección ética del ciudadano: Vivir en la verdad”.
Ese es un tema de vital importancia en mi criterio, más aún en las
circunstancias que estamos viviendo en Cuba, en las que la Verdad
aparece tergiversada y manipulada por “Tirios y Troyanos”, al punto
que en muchas ocasiones se nos hace muy difícil identificar la
realidad objetiva dentro de la cual nos estamos desenvolviendo, dado
los barrajes publicitarios que atiborran al respecto a nuestras mentes
e incluso a nuestras conciencias. Decidí entonces, integrar mis
reclamos sobre INTERNET con este tema de Vivir en la Verdad. Lo voy a
expresar pues, en medio del estrés sistemático que me produce hacer
mi trabajo “en línea” con constantes interrupciones, demoras
desesperantes, reiteradas caídas de la comunicación y una situación
verdaderamente crítica en general. Al respecto de la cual se me
crearon muy pocas esperanzas de solución, cuando conocí los
planteamientos expresados en los últimos días por la Televisión Cubana
por parte de algunos funcionarios que tienen que ver con esta
importante herramienta del mundo actual y los planes de inversiones
que se prevén en el país, con un tiempo de realización de tantos años
que por la edad que tengo de seguro no podré disfrutar en vida. Es
como si la Revolución Tecnológica Digital que actualmente mueve al
mundo nada tuviera que ver con Cuba y con los cubanos “todos
profanos”, los que debiéramos conformarnos con las migajas detenidas
en el tiempo que se nos ofrecen al respecto como si fueran grandes
cosas con planes pilotos que “no son planes pilotos” de algo que en el
mundo es habitual y cotidiano, con conexiones en espacios abiertos
como si fueran la gran novedad con todos los inconvenientes que ello
tiene.
Decidí en consecuencia, dejar planteado este asunto en mi actual
Crónicas Cubanas de la semana y dar testimonio en su contenido sobre
un debate tan importante como el que se efectuó en el histórico
Palacio ubicado en la Avenida del Puerto de La Habana Maravilla, tan
abandonada, que hoy alberga al Centro Padre Félix Varela y a la
Revista Espacio Laical, en donde durante muchos años funcionó el
legendario Seminario San Carlos cuna en la que se fraguó la
nacionalidad cubana. En definitiva Vivir en la verdad, es salirnos de
las realidades virtuales que se nos quieren imponer, tal y como sucede
con las explicaciones que en los medios oficiales se nos plantean
actualmente sobre los propósitos de lo que se hace para que los
cubanos podamos acceder y formar parte de la Revolución Digital del
mundo de hoy. Comenzando por los espacios abiertos, expuestos al
clima, sin comodidad para sentarnos y coexistiendo con
intermediarios y algunos maleantes que nos merodean para vendernos
las tarjetas de tiempo en línea, que no encontramos en cantidades
suficientes en los puntos oficiales de venta; y también ocasionalmente
en el caso de los maleantes, si nos descuidamos arrebatarnos nuestros
equipos, lo que ya ha sucedido en algunas ocasiones. Todo un
espectáculo en una Habana que como se expresa en una canción de la
orquesta Los Van Van: “ya no aguanta más”.
INTERNET no es una dádiva que generosamente se nos ofrece por la
burocracia oficial. INTERNET es una necesidad y una urgencia para la
vida, la economía, la política y la sociedad en el mundo actual;
aunque ello no se quiera reconocer por la burocracia oficialista
cubana. Constituye además una realidad del avance de la humanidad de
la que ya no se puede prescindir, muy a pesar de la falta de voluntad
política con que se ha estado desenvolviendo en Cuba desde sus
inicios. Y, que en la actualidad incluso, hay que reconocer, que se
manifiesta con una actitud menos intolerante y superior a la
descalificación y la criminalización con que se trató durante mucho
tiempo como si sólo fuera un instrumento del “enemigo”. Así no se
podrá asumir el desarrollo que tanto necesitamos.
Por otra parte, los ponentes del diálogo fueron certeros en su
introducción al tema desde los puntos de vista de la filosofía, la
psicología, la ética, el derecho y la práctica concreta en los medios
de comunicación social. Una vez efectuado lo importante es esperar por
su publicación en el próximo número de Espacio Laical lo cual es una
práctica sistemática de esta Revista católica, que contribuye muy
especialmente a la difusión de sus debates que considero de
excepcional importancia en la Cuba actual, tan necesitada de un
diálogo de todos con todos. Recomiendo buscar el próximo número de la
Revista y/o leerla en línea tan pronto se publique en su espacio
digital, <http://www.espaciolaical.org/>
http://www.espaciolaical.org/
Finalmente, quiero reseñar algunas cuestiones sobre el
desenvolvimiento del debate. La conducción fue efectiva y discreta a
cargo de Gustavo Andújar, Director de Espacio Laical. Desde el punto
de vista psicológico con un acertado enfoque personalista, la joven
psicóloga Nelys Martín nos ofreció una disertación motivadora para el
diálogo que en definitiva se estableció con los asistentes. Monseñor
Antonio Rodríguez quien fuera Rector del Seminario San Carlos de
Archidiócesis de La Habana y actual director de la Revista Vitral de
la diócesis de Pinar del Río, a quien le profeso un particular aprecio
y admiración realizó una disertación magistral desde el punto de vista
filosófico y teológico sobre las esencias del significado de Vivir en
la Verdad. Desde el punto de vista jurídico el abogado Rolando Suárez
imposibilitado de asistir personalmente por asuntos de trabajo, nos
envió un análisis jurídico en “Power Point” que nos fuera presentado
por el Moderador del Debate. En el último turno de exposición mi
colega Fernando Rasverg, destacado Corresponsal de Prensa Extranjera,
uruguayo, y ya cubano también en mi opinión muy personal, nos planteó
una interesante disertación testimonial sobre las implicaciones
objetivas y subjetivas que ha sufrido en su vida profesional por su
decisión de vivir en la Verdad, junto con una muy interesante
apreciación de la realidad actual de la prensa cubana que comparto
plenamente. Así lo viví, y así lo expreso en espera de su
publicación efectiva en el próximo número de Espacio Laical, como voz
que clama en el desierto en lo referido a INTERNET, y con mis respetos
por el pensamiento diferente y sin querer ofender a nadie en
particular.
Publicado en el periódico Por Esto! de Mérida, Yucatán, México, el
lunes 4 de abril del 2016.
No hay comentarios:
Publicar un comentario