Brexit tambaleó a la Unión Europea
Por Hedelberto López Blanch
Algo tan cercano a la realidad es que
la aprobación del Brexit en el reciente referendo realizado en Gran Bretaña ha
causado una especie de terremoto económico y político en la Unión Europea , que
también ha tenido repercusiones sísmicas para otras regiones del mundo.
Todos los especialistas coinciden en
que las consecuencias van a ser muy negativas para la UE si los organismos directivos
centrales no reconocen y a la vez tratan de resolver los graves problemas que
están incidiendo dentro de la
Unión desde hace años.
A los británicos se les dio la oportunidad de
votar por dos opciones: el Brexit, abreviatura de dos palabras en inglés, Britain (Gran Bretaña) y exit (salida), que significa el
abandono por el Reino Unido de la Unión Europea , o hacerlo por el Bremain (Britain y Remain: permanecer).
El 51,9 % emitió su sufragio a favor de la salida.
Entre las causas que se le achacan a
esa decisión, se encuentran la crisis que atraviesa la Unión desde 2008 la cual no
ha podido solventar; los bajos crecimientos entre sus miembros; los graves
problemas económicos, déficit de empleos y reducción de programas sociales en
varias naciones como España, Portugal, Francia, Grecia, Irlanda; la caída del
valor del euro; las medidas de austeridad impuestas por la Troika (Banco Central
Europeo, Comisión Europea y Fondo Monetario Internacional) y la llegada de gran
número de inmigrantes los que pueden moverse por todos los países de la Unión Europea.
Esa inseguridad económica y social ha
destapado la caja de Pandora y puede arrastrar a la vez a otras naciones a
seguir el ejemplo británico.
Existen varios movimientos
independentistas que piden y exigen cambios para poderse zafar de las ataduras
unionistas, lanzarse por caminos de mayor autogobierno y controlar mejor sus
políticas sociales y económicas.
Sobre la posibilidad de una consulta
popular parecida al Brexit, ya se
escuchan voces en importantes naciones del bloque como Francia, Italia, Países
Bajos, entre otros.
Las consecuencias para Gran Bretaña
dependerán en gran medida de las negociaciones que realizará con la Unión Europea ya que aún no se
ha aclarado si va a continuar formando parte del mercado único europeo o
tratará de alcanzar un acuerdo de libre comercio con el bloque. Claro que si
decide mantenerse como miembro del mercado único deberá aceptar sus reglas que
permiten, entre otras medidas, el libre movimiento de personas.
Asimismo, deberá sopesar la decisión
que tomará pues el comercio actual con los otros 27 países del bloque, absorbe
la mitad de las exportaciones londinenses.
Las normas establecidas por la UE expresan que el periodo
mínimo para la salida, a partir de decisión emitida por cualquier nación, será
de dos años. Durante ese período, Gran Bretaña continuará cumpliendo los
tratados y leyes de la
Unión Europea , pero no participará en la toma de
decisiones. El proceso puede durar más de dos años, dependiendo del ritmo de
las negociaciones.
En Londres, los primeros resultados
después de la consulta se sintieron inmediatamente: El precio del barril del
petróleo de Brent cayó un 6 %; el valor de la libra esterlina bajó a su nivel
mínimo en relación con el billete verde desde 1985, o sea, 11 % para oscilar en
los primeros días entre 1.32 y l.33 de dólar.
La importante entidad financiera London
School of Economics estima que la salida del proyecto europeo puede costarle al
Reino Unido entre el 2,2 % y el 9,5 % de su Producto Interior Bruto (PIB),
mientras que el Ministerio de Finanzas británico predijo una caída del PIB en
un 6,2 %.
Otra personalidad en el mundo
financiero, Alexéi Kudrin director del Centro de Estudios Estratégicos y ex
ministro de Finanzas ruso, significó que la salida de Reino Unido de la UE hará bajar al país del
segundo al tercer lugar en el ranking de las mayores economías por el PIB a
paridad de poder adquisitivo (PPA).
Y aseguró que "El Brexit cambiará
las posiciones de los líderes mundiales: la Unión Europea dejará
de ser la segunda economía (19,2 billones de dólares) y bajará al tercer puesto
(16,5 billones) después de China (19,39 billones) y Estados Unidos (17,95
billones)".
Christina Lagarde, jefa de FMI, organismo que
también hizo campaña para que Londres no abandonara la UE , instó a las autoridades del
Reino Unido y Europa a trabajar conjuntamente para asegurar una transición suave
a la nueva realidad económica, incluida la aclaración de los procedimientos y
amplios objetivos que puedan guiar el proceso.
En el ámbito mundial también se han
sentido los efectos negativos del Brexit pues en los primeros momentos, los
mercados se desplomaron; el precio de la onza de oro subió en 50 dólares;
varias monedas en países latinoamericanos perdieron valor con respecto al
dólar; en Chile, el precio del cobre bajo a 2,11 dólares la libra.
Directivos del Mercado Común del Sur,
(MERCOSUR) ya están previendo las dificultades que pueda traer el Brexit para
las futuras negociaciones sobre un tratado de libre comercio entre esa
institución y la Unión Europea.
En resumen, las olas del Brexit han
empezado a llenar el barco de la Unión y si continúan subiendo las aguas, la
nave europea podría irse a pique.
No hay comentarios:
Publicar un comentario