martes, 18 de febrero de 2014
ATENTADO A LAS SOBERANIAS NACIONALES
TLC: atentado a las soberanías nacionales
Domingo, 16 de Febrero de 2014
Publicado en Opciones, Ajintem, Aporrea, Rebelión, Por Esto, Kadadiasomosmas, Cubainformación, Patria
Hedelberto López Blanch
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La primera fue la convicción de la gran mayoría de los países de este hemisferio de integrarse para enfrentar, en forma más efectivas, los constantes embates políticos y económicos de la potencia unipolar.
Así surgieron la Alianza para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), PetroCaribe, la Unión de Naciones del Sur, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), además de reforzase el Mercado Común del Sur (MERCOSUR.
En sentido completamente opuesto resultó la segunda vertiente, pues Estados Unidos no se dio por vencido y comenzó a imponer, apoyado por gobiernos afines en la región, los Tratados de Libre Comercio (TLC) bilaterales, bajo las mismas condiciones del Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN) acordado con México en 2004, que ha provocado que más de la mitad de los aztecas esten por debajo del índice de pobreza.
Los TLC fueron diseñados por Estados Unidos y las naciones desarrolladas, en combinación con compañías transnacionales, con el objetivo de controlar económica, financiera y hasta políticamente a los países menos desarrollados que no pueden competir con empresas foráneas las cuales poseen tecnologías modernas y abundante capital. Es la versión del colonialismo moderno.
Bajo ese esquema, ya resultaría innecesario lanzar agresiones o invasiones armadas contra otros países para dominarlos, pues por medio del control económico y financiero las compañías transnacionales, apoyadas por sus Estados originarios, poseerán fuerza y poder hasta para imponer presidentes afines, bajo la amenaza de tomar sanciones y desestabilizar completamente a un gobierno.
De esa forma, logró firmar acuerdos de TLC con cinco países de Centroamérica (Guatemala, Honduras, Costa Rica, El Salvador y Nicaragua, antes de la llegada de Daniel Ortega al poder) al que se incorporó República Dominicana, además de hacerlo por separado con Panamá.
Consiguió que el gobierno neoliberal de Chile también suscribiera un Tratado, al que le siguieron los gobiernos de Perú y Colombia.
Con mucha convicción, el premio Nobel de Economía 2001, Joseph Stiglitz, quien entre 1997 y 2000 fue economista jefe del Banco Mundial, ha alertado en varias ocasiones los riesgos que entrañan los TLC, al aumentar las desigualdades sociales y agudizar la pobreza en los núcleos rurales.
En una reciente conferencia efectuada en Lima, explicó que se debe prestar mucha consideración en aprovechar las nuevas aportaciones, pero también los nuevos riesgos que surgen con los TLC.
Puso como ejemplo el TLCAN y señaló que después de suscribirse, los salarios en la nación azteca son más bajos, la pobreza rural aumentó y la desigualdad creció.
Según Stiglitz, eso se debe a que tras la firma del acuerdo “se destruyeron empleos más rápido que los que se crearon (...) y los pobres mexicanos, que eran los agricultores no pudieron competir con los estadounidenses», quienes reciben altas subvenciones estatales”.
En otro foro realizado en Ecuador, Stiglitz declaró que la globalización ha sido diseñada para promover mayores ganancias del sistema financiero y para que haya una mayor transferencia de dinero desde los países en desarrollo a los industrializados.
Los TLC según el destacado economista, aumentan la desigualdad y es una herramienta utilizada por Estados Unidos para “dividir a los países subdesarrollados, destruir el multilateralismo e imponer sus industrias”.
A raíz del fracaso del ALCA, el ex secretario comercial de la Casa Blanca, Robert Zoellick anunció que no esperaría la concreción de acuerdos comerciales por consenso e informó que en los futuros Tratados se incluirían temas que interesaban especialmente a Washington y que habían sido rechazados en las reuniones sobre el ALCA realizadas primero en Miami y después en Argentina.
Zoellick se refería a los bancos financieros, los servicios básicos como la electricidad, las telecomunicaciones, la salud y el agua, entre otros, los que ya entraron a formar parte de los nuevos TLC bilaterales firmados.
Washington ha utilizado los TLC y los acuerdos sobre inversiones bilaterales y regionales para lograr concesiones que no es capaz de conseguir en la Organización Mundial del Comercio (OMC), donde los países en desarrollo pueden unirse y negociar unas reglas más favorables.
La Organización No Gubernamental británica Orfam publicó un informe sobre el efecto de los Tratados en los países del Sur donde puntualizó que el avance inexorable de estos TLC sobre comercio e inversiones, negociados en gran medida a puertas cerradas, amenazan con socavar la promesa de que el comercio y la globalización servirían como motores para reducir la pobreza.
Según Orfam, en un mundo cada vez más globalizado, estos acuerdos benefician a los exportadores y a las empresas de los países ricos a expensas de agricultores y trabajadores pobres, con graves consecuencias para el medio ambiente y privan a los países en desarrollo de su capacidad de dirigir la economía nacional y de proteger a sus ciudadanos más pobres.
Al sobrepasar las disposiciones negociadas a nivel multilateral, los convenios bilaterales como están diseñados, imponen reglas de mayor alcance y difícil marcha atrás que desmantelan de manera sistemática las políticas nacionales de promoción del desarrollo.
Tras las firmas de los TLC, como promedio el 80 % de las exportaciones estadounidenses de productos industriales y de consumo, quedan con arancel cero inmediatamente y el 85% esta libre de impuestos en cinco años.
De esa forma, las industrias nacionales van desapareciendo paulatinamente y sus poblaciones se dedican a vender en las tiendas las mercancías recibidas desde el exterior.
Entre los acápites de los Tratados, se establece que los países firmantes otorgarán acceso a mercados en todos los servicios, como telecomunicaciones, mensajería rápida, servicios de computación, turismo, energía, transporte, construcción e ingeniería, servicios financieros, agua, educación, entretenimientos, seguros y otros.
Imponen protecciones y trato no discriminatorio para productos digitales como software, música, texto y vídeos, a la par que fortalecen las patentes estadounidenses, las marcas y los secretos comerciales.
Para que no existan dudas de que el resultado final sería dirigir no solo la economía sino hasta a los gobiernos, los documentos establecen marcos legales seguros para inversores norteamericanos pues tras la entrada de sus capitales en esas naciones los convenios no podrán ser cancelados por leyes posteriores. Si eso llegara a ocurrir, los gobiernos deberán abonar sumas millonarias para resarcir las pérdidas ocasionadas.
Los TLC son la nueva estrategia de dominación neocolonial en este mundo globalizado y la forma de tratar de que no se concrete la verdadera integración latinoamericana. Muchos países ya se han dado cuenta de ese enorme peligro; otros, sin embargo se han montado en ese peligros tren.
lunes, 17 de febrero de 2014
VICEPRESIDENTES
Vicepresidentes
Ciro Bianchi Ross * digital@juventudrebelde.cu
15 de Febrero del 2014 21:24:24 CDT
De todos los cubanos que ocuparon la Vicepresidencia de la República,
solo uno pasó desde ese cargo a desempeñar la primera magistratura.
Era el de vicepresidente un puesto poco apetecible en la vida política
anterior a 1959. Se suponía que era la segunda posición de la
República, pero en puridad esa segunda posición correspondía al
Alcalde de La Habana, quedando para el vice la responsabilidad de
sustituir al Presidente en caso de ausencia, y presidir el Senado, que
por otra parte tenía su propio titular.
La Asamblea Constituyente de 1928, que reformó la Constitución de
1901, suprimió el cargo. Se otorgó entonces al Secretario de Estado
--Ministro de Relaciones Exteriores-- la facultad de sustituir al
Presidente. Volvió el cargo en 1936 y la Constitución de 1940 lo
restituyó en uno de sus títulos. Puede suponerse que, emergidos del
mismo tique electoral, el Presidente y su vice trabajarían unidos. No
ocurría así en la práctica, y no era raro que existieran rencillas y
enemistades entre ellos. José Miguel Gómez nunca soportó a Alfredo
Zayas y lo torpedeó en 1913, en sus intentos de alcanzar la
Presidencia. No fueron buenas las relaciones entre Ramón Grau San
Martín y Raúl de Cárdenas, y las fricciones entre Carlos Prío y su
vicepresidente, Guillermo Alonso Pujol, fueron tantas y tan graves que
el mandatario llegó a retirarle la escolta a su vice. Enrique José
Varona, que fungió como vicepresidente del general Mario García
Menocal entre 1913 y 1917, desistió de acompañarlo en la reelección,
disgustado con la conducta de los conservadores y con el propio empeño
continuista del mandatario. Con anterioridad, en el mismo año de 1913,
había renunciado a la presidencia del Partido Conservador por entender
<>. Se salió Varona a
partir de entonces de la política activa, aunque no dejó de mostrar
preocupación por los asuntos públicos hasta el mismo instante de su
muerte, en noviembre de 1933, tras la caída de la dictadura de Gerardo
Machado, que tanto combatió.
Varona es un caso curioso en la vida cubana. El pensador eclipsa
siempre en él al político cuando, al decir de Cosme de la Torriente,
era <>. Era, puntualizaba
Torriente, <>.
El suicida
Tomás Estrada Palma quiso llevar de vicepresidente al mayor general
Bartolomé Masó. No aceptó este, pues habiendo sido, al igual que don
Tomás, presidente de la República en Armas, insistió en aspirar
también a la primera magistratura. En definitiva, las irregularidades
y presiones del Gobierno interventor norteamericano en la Isla a favor
de Estrada Palma forzaron el retraimiento de Masó, y el 31 de
diciembre de 1901 Estrada Palma concurrió a las elecciones como
candidato único y logró la victoria. Raros comicios aquellos en los
que el aspirante no participó en la campaña ni se encontraba siquiera
en Cuba.
Quiere el escribidor precisar que aquellas elecciones amañadas no
agriaron los nexos entre ambas figuras. Ya electo presidente, Estrada
Palma desembarcó por Gibara y se adentró en territorio cubano rumbo a
Manzanillo. Atravesó el río Cauto por el llamado Paso de la Mula.
Cerca de Yara lo esperaba Masó. Se fundieron en un estrecho abrazo
entre aplausos y vítores. El <> de La Jagüita se convirtió en
anfitrión del <> de Central Valley; lo alojó en su casa y
comían como en familia. Evocaban, en amenas charlas, lejanos
recuerdos, pero caían a veces en silencios abismales al abordar la
actualidad. <>.
Al rehusar Masó integrar la candidatura presidencial de Estrada Palma,
se barajaron los nombres de Manuel Sanguily y Luis Estévez y Romero.
Sanguily rechazó el ofrecimiento y el otro lo aceptó luego de
múltiples gestiones y de la intervención personal de Máximo Gómez, que
lo visitó para ayudarle a decidir. Era un abogado distinguido y su
matrimonio con Martha Abreu lo puso en relación con una de las
familias más ricas de la región central y lo vinculó a la lucha por la
independencia. Escribió varios libros, entre ellos el titulado Desde
el Zanjón hasta Baire, que apareció en 1899 y que Sanguily consideró,
en su momento, el estudio más completo del período encerrado entre dos
grandes guerras. No acompañó Luis Estévez a don Tomás hasta el fin de
su mandato. Renunció el 31 de marzo de 1905. Alegó motivos de salud,
pero en opinión de García Garófalo, su biógrafo, la dimisión, por su
fecha y por lo que en ese momento ocurría en Cuba, puede interpretarse
como una expresión de inconformidad con la afiliación de Estrada Palma
al Partido Moderado, recién fundado entonces, y a su intención de
reelegirse. Se suicidó en París, el 3 de febrero de 1909, justo un mes
después de la muerte de Martha.
Zayas y miguelistas
En su reelección, don Tomás lleva como vice al general Domingo Méndez
Capote. Había presidido la Asamblea Constituyente de 1901 y ocupó la
presidencia del Senado durante el primer período de Estrada Palma. Fue
una vicepresidencia efímera; de poco más de cuatro meses, entre mayo y
septiembre de 1906. Incapaz de sofocar la insurrección liberal de ese
año --la llamada <>-- y negarse a llegar a un acuerdo
con los alzados, Estrada Palma prefirió, en virtud de la Enmienda
Platt, solicitar la intervención norteamericana, y antes de renunciar
exigió la dimisión de todos sus ministros y la del vicepresidente, con
lo que dejó acéfala la República y las puertas abiertas a la
injerencia extraña.
La segunda intervención se extendería hasta el 28 de enero de 1909,
cuando accedió al poder el tique José Miguel Gómez-Alfredo Zayas. Los
conservadores y, con ellos, los derrotados de Estrada Palma,
estrecharon filas en torno a García Menocal, su caudillo natural.
Dentro de las huestes liberales pugnaban las facciones de miguelistas
y zayistas, con José Miguel al frente del grupo <>, y Zayas,
del Partido Liberal propiamente dicho. Las elecciones parciales de
1908 demostraron a los liberales que de permanecer divididos podían
olvidarse del triunfo. Fue así que ambas facciones se unieron para
llevar a José Miguel de presidente y a Zayas de vice, con la promesa
de que este último sería el candidato a la presidencia para el período
1913-1917. Así ocurrió, pero no resultó electo.
En esa ocasión Zayas, con Eusebio Hernández --general de la
independencia y eminente ginecólogo-- de vice, fueron derrotados por la
maquinaria Menocal-Varona. En las elecciones de 1908, Menocal había
llevado a Rafael Montoro como vice. Los liberales los derrotaron con
facilidad. El pasado autonomista de Montoro restó votos a esa
candidatura. Era previsible, pues antes su nombramiento como profesor
universitario fue impugnado con tal fuerza que no pudo acceder al
claustro. Los que se le oponían olvidaban que aquel hombre, de pulcra
actuación personal y defensor únicamente de sus ideas políticas, de
haberse ido a España al cesar la soberanía española en la Isla hubiera
disfrutado de una prometida senaduría vitalicia y de todos los honores
imaginables, entre estos un marquesado, con Grandeza de España, que
nunca quiso aceptar. Decidió permanecer en la tierra que lo vio nacer.
Era un hombre demasiado valioso para que la República lo dejara de la
mano. Fue, con Estrada Palma, embajador en Inglaterra y Alemania:
ministro de la Presidencia con Menocal, en 1913, y canciller en el
Gobierno de Zayas. Pasó por la vida pública sin mancharse. Al final de
su vida, el pueblo de La Habana hizo una colecta para que pudiera
morir en casa propia.
Con las ganas
El general Emilio Núñez acompañó a Menocal en su segundo mandato,
entre 1917 y 1921. Cuando Máximo Gómez murió el 17 de junio de 1906
impugnaba la reelección de Estrada Palma y promovía la candidatura
presidencial de Núñez, un hombre que participó en las tres guerras por
la independencia y que en la del 95 encabezó, con acierto, el
Departamento de Expediciones. Estuvo en la Asamblea Constituyente de
1901 y fue Gobernador de La Habana hasta 1908, cuando se empeñó en
organizar a los veteranos de las luchas patrias. Figura prominente del
Partido Conservador, fue muy activa su participación en las campañas
electorales de 1908 y 1912. Menocal lo nombró ministro de Agricultura,
Comercio y Trabajo, sectores agrupados entonces en una sola
secretaría, y en 1916 despuntó como candidato de los conservadores a
la Presidencia de la República. Pero decidido Menocal a reelegirse,
Núñez aceptó la candidatura para vicepresidente y, vencedor en los
comicios, sustituyó a Varona como tal.
Otro general de la Independencia, Francisco Carrillo, llegó al poder
con Zayas, en 1921. Zayas aspiró por el Partido Popular, organización
minúscula, de bolsillo, que triunfó con el apoyo de los conservadores
a cambio de que en las elecciones generales siguientes allanara la
victoria de Menocal. Es decir, esta vez no es llevado por los
liberales. Algo curioso. Zayas fue despojado de la presidencia del
Partido Liberal en un ruidoso pleito. El hecho de ser derrotado ante
los tribunales le abrió, por esos contrasentidos de la vida
republicana, la oportunidad de llegar a la Presidencia. Su contrario,
por los liberales, fue José Miguel, que llevó de vice a Miguel Arango
y Mantilla, figura minúscula como político, pero con gran influencia
en el sector azucarero. Solo el arraigo de José Miguel sobre las
huestes liberales pudo hacer posible que se obviara para
vicepresidente la candidatura del comandante camagüeyano Enrique
Recio, hombre de gran simpatía popular. Ese revés electoral anticipó
quizá la muerte de José Miguel, que falleció en Nueva York cuando
todavía no había transcurrido un mes de la toma de posesión de su
adversario.
Carlos de la Rosa fue el último vicepresidente electo al calor de la
Constitución de 1901. El cargo, ya se dijo, desapareció con la reforma
constitucional de 1928. Llegó al poder con Gerardo Machado y
representó, aseveran especialistas, una modificación en la política
electoral cubana desenvuelta hasta entonces entre <>. Se asegura que peleó en el Ejército Libertador, pero
alcanzó un grado tan, tan modesto, que sus panegiristas tienen a bien
no consignarlo. Matriculó la carrera de Derecho, pero no llegó a
graduarse. Su actuación en la vicepresidencia es calificada de
discreta, que es un término que engloba, por lo general, el de
mediocre, culminación de una modesta carrera que empezó como alcalde
de Manguito y luego de Cárdenas. Machado, cuando desapareció el cargo,
lo compensó con una senaduría vitalicia. Murió en 1933, poco antes del
derrumbe machadista.
Federico Laredo Bru fue el único vicepresidente que ocupó la primera
magistratura, luego de que el Senado juzgara y destituyera al
presidente Miguel Mariano Gómez. Ocurrió en 1936. Fulgencio Batista
ganó la presidencia en 1940, y tuvo como vice al eminente médico
Gustavo Cuervo Rubio. Se mencionaron arriba los vice de Grau y Prío.
Rafael Guas Inclán fue, entre 1955 y 58, vicepresidente de Batista.
Renunció para aspirar a la alcaldía habanera en la farsa electoral de
noviembre de ese último año. Ganó la plaza y debió tomar posesión el
24 de febrero de 1959. Triunfó la Revolución y Guas se quedó con las
ganas.
-
Ciro Bianchi Ross
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sábado, 15 de febrero de 2014
12 DE FEBRERO DE 1959
26 °C .15 de Febrero del 2014 16:37:52 CDT
Diario de la juventud cubana
Edición digital
El 12 de febrero de 1959, el grupo más revolucionario del Consejo de Ministros recién formado, llegó a la conclusión de que hacía falta una dirección de verdadero prestigio y arraigo popular, y coincidieron en que solo Fidel podía detener la crisis, si se hacía cargo del Gobierno.
Varios Autores
Eugenio Suárez Pérez digital@juventudrebelde.cuAcela Caner Román digital@juventudrebelde.cu
12 de Febrero del 2014 17:21:05 CDT
Cuando el periodista Herbert Matthews entrevistó a Fidel Castro en la Sierra Maestra, el 17 de febrero de 1957, entre los muchos aspectos que indagó estuvo el referido a la organización de un Gobierno Revolucionario. En un reportaje sobre la lucha en la Sierra —publicado en The New York Times—, Matthews incluye la respuesta de Fidel:
«Le pregunté sobre las informaciones en que se aseguraba que proclamaría un Gobierno Revolucionario en la Sierra Maestra. “Aún no”, replicó. “Aún no es el momento. Lo haré en su oportunidad. Tendrá más impacto por la demora. No hay prisa”».
El Gobierno revolucionario en la Sierra
En diciembre de 1957, el Movimiento 26 de Julio (M-26-7) propuso al doctor Manuel Urrutia Lleó ser su candidato a la presidencia del Gobierno Provisional, a pesar de que este no militaba en las filas de esa organización. La propuesta partió del respeto que ganó el magistrado de la Audiencia de Santiago de Cuba, al emitir su voto absolutorio a los acusados en la Causa No. 67 de 1956, por su participación en el alzamiento de Santiago y la expedición del yate Granma.
El 11 de agosto de 1958, en Miami, los representantes de las organizaciones contrarias al régimen de Batista, por mayoría, apoyaron la candidatura del doctor Urrutia para presidente provisional de la República.
Según la opinión de Luis Buch Rodríguez —testigo excepcional de estos acontecimientos—, los primeros pasos del Gobierno Revolucionario comienzan a darse en la Sierra Maestra el 7 de diciembre de 1958, cuando el doctor Manuel Urrutia Lleó llegó a suelo cubano procedente de Venezuela.
Pocos días después, el 18 de diciembre, en La Rinconada —sede temporal de la Comandancia General del Ejército Rebelde—, se reunió la Dirección Nacional del M-26-7 con los coordinadores provinciales y los comandantes Raúl Castro y Juan Almeida. Diferentes cuestiones referidas al ya cercano fin de la guerra y al gobierno provisional formaron parte de la agenda.
Fidel anunció que el 24 de febrero, en el histórico poblado de Baire, Urrutia Lleó juraría como Presidente del Gobierno provisional. El triunfo de la Revolución adelantó la toma de posesión.
Designado por Urrutia en el cargo de Ministro de la presidencia y Secretario del Consejo de Ministros, Luis Buch informó a los reunidos en La Rinconada de algunos nombramientos previstos por el presidente para su gabinete.
Varios compañeros, al oír el nombre de la persona propuesta para ministro de Justicia, objetaron la decisión de Urrutia. En ese momento, Fidel intervino para explicar que ninguno de los presentes gozaba de facultades para nombrar ministros, y solo correspondía hacer proposiciones al Presidente, por ser el único que tenía las prerrogativas constitucionales.
Oído el informe de los nombramientos y tras acordar proponerle al Presidente la creación del Ministerio de Recuperación de Bienes Malversados, el Comandante en Jefe expresó:
«Bueno, ese es el Gobierno de ustedes, porque yo estaré en contacto con el pueblo, en uniones con los obreros, en la radio y televisión, criticando los errores que se cometan».[1]
Fidel no formaría parte del gobierno. Hacía mucho tiempo que él había anunciado su decisión.
Urrutia toma posesión de la presidencia provisional
Al triunfar la Revolución, el 1ro. de enero de 1959, Fidel al frente del Ejército Rebelde entró en Santiago de Cuba y convocó a una concentración en el parque Céspedes. Muy tarde en la noche, desde el balcón del Ayuntamiento, el jefe rebelde pronunció su histórico discurso. Terminada la alocución del Comandante, Manuel Urrutia prestó el juramento de toma de posesión y se dirigió al pueblo santiaguero como Presidente Provisional de la República.
En Santiago, el 2 de enero, Urrutia dio a conocer su decisión de declinar a favor del comandante Fidel Castro la jefatura de las Fuerzas de Tierra, Mar y Aire, cuyo mando —según la Constitución del 40— correspondía al Presidente de la República.
Los días 3 y 4 de enero, el Gobierno Revolucionario sesionó en la Universidad de Oriente donde tomó importantes decisiones. Y, el 5 de enero, junto a algunos miembros de su gabinete, Urrutia partió rumbo a La Habana.
El vuelo hizo escala en el aeropuerto de Camagüey. Urrutia fue a encontrarse con Fidel, que había arribado a la capital agramontina al frente de la Caravana de la Libertad.
Acompañado por el Che, quien ha llegado de La Habana, Fidel y Urrutia conversan largamente en el interior de la nave aérea. Al descender del avión, el Comandante en Jefe informó sobre algunas decisiones tomadas por el Presidente para el completamiento del Consejo de Ministros. Entre ellas, sobresalía la designación del doctor José Miró Cardona como Primer Ministro del Gobierno Revolucionario.
El Gobierno provisional no avanza
Instalado en el Palacio Presidencial, Urrutia apresuró el completamiento de su gabinete. El 23 de enero de 1959, el proceso de articulación del Consejo de Ministro concluyó cuando se aprobó la propuesta hecha por el presidente de crear el Ministerio de Bienestar Social, al frente del cual estaría la doctora Olga Mederos.
La composición del gabinete ministerial, mayoritariamente masculina, era en realidad muy heterogénea. Integrado por personalidades de diferentes tendencias políticas, el Gobierno estaba fuertemente dividido en dos bloques. De un lado, luchadores revolucionarios —en su mayoría provenientes de las filas del Movimiento 26 de Julio—, y especialistas destacados cuyo pensamiento se fue radicalizando en la lucha; del otro, figuras cuyas posiciones reformistas y pensamiento conservador las convirtieron en freno para la Revolución. Entre estos últimos se incluían el Presidente Urrutia y Miró Cardona, el Primer Ministro, quienes a pesar de haber mantenido una postura opuesta al régimen de la tiranía, sus tendencias individualistas y egocéntricas les impidieron superar el sentido burgués de su pensamiento. Los titulares de Obras Públicas, Agricultura y Trabajo mantenían posiciones muy conservadoras, al igual que los Ministros de Estado y Bienestar Social.
No era de extrañar que el ala retrógrada presente en el Gobierno Provisional retrasara o paralizara las leyes contenidas en el Programa del Moncada que producirían los cambios revolucionarios.
Unido a esto, el Presidente Urrutia mostró su falta de eficiencia al frente del Gobierno. Tal vez por deformación profesional —ya que las audiencias de los tribunales provinciales y el Tribunal Supremo de Justicia funcionaban de manera colegiada—, él no concebía que en los ministerios se tomaran decisiones sin la anuencia del Consejo de Ministros. Muchas reuniones y muy pocos acuerdos, recrudecían las quejas de los ministros en contra de las sesiones del Consejo.
En la medianoche del 12 de febrero, tras concluir una sesión del Consejo, el grupo más revolucionario del Consejo de Ministros llegó a la conclusión de que así no podían continuar. Hacía falta una dirección de verdadero prestigio y arraigo popular. Todos coincidieron en que solo Fidel podía detener la crisis, si se hacía cargo del Gobierno.
A pesar de estar conscientes de que el Comandante en Jefe había manifestado su propósito de no formar parte del Gobierno, Armando Hart, Faustino Pérez, Enrique Oltuski y Julio Camacho decidieron salir a buscarlo.
La gravedad de la situación exigía tomar medidas radicales para evitar la debacle.
Tras múltiples análisis y consciente de que no había otra solución, Fidel expresó que aceptaría tal proposición siempre que —sin menoscabo a las facultades que, conforme a la Ley Fundamental, le correspondían al Presidente de la República— al cargo de Primer Ministro del Gobierno Revolucionario le correspondiera el control directo de la política general.
Informado por Luis Buch, el presidente Urrutia estuvo de acuerdo con las gestiones que venían desarrollando. Por su parte, Miró Cardona expresó que la presencia de Fidel era imprescindible para mantener la autoridad del Gobierno Revolucionario.
En Palacio, el 13 de febrero se reunió el Consejo de Ministros con el fin de analizar el requisito planteado por Fidel para asumir el cargo de Primer Ministro. Tras su debate, aprobó que: «Corresponde al primer ministro dirigir la política general del Gobierno, despachar con el presidente de la República los asuntos administrativos, y acompañado de los ministros, los propios de los respectivos departamentos.»[2]
Al concluir la sesión del Consejo, José Miró Cardona dio lectura a su carta de renuncia, dirigida al Presidente Urrutia, que en una de sus partes dice: «A mi juicio, corresponde asumir a quien por su jerarquía histórica es el jefe de la Revolución, el doctor Fidel Castro.»[3]
Fidel asume el cargo de primer ministro
La tarde del 16 de febrero de 1959, Fidel Castro Ruz tomó posesión del cargo de Primer Ministro. En la solemne ceremonia celebrada en una pequeña sala contigua al Salón de los Espejos del Palacio Presidencial, Fidel expresó:
«De cuantas tareas he tenido que realizar en mi vida, ninguna considero tan difícil como esta, ninguna considero tan preñada de obstáculos, ninguna considero tan dura de llevar adelante […] Estaré aquí mientras la máxima autoridad de la república —que es el Presidente— lo estime pertinente o mi conciencia me diga que no soy útil».
Comenzó así una nueva etapa del Gobierno Revolucionario que haría posible la aprobación de la Ley de Reforma Agraria y de otras leyes y medidas revolucionarias prometidas al pueblo de Cuba en el Programa del Moncada.
Sin embargo, aun con la presencia de Fidel en el Gobierno, esta primera crisis no estaba superada por completo. Las trabas impuestas por el presidente Urrutia y otros elementos reaccionarios desencadenaron, meses más tarde, una crisis todavía más profunda.
*Director de la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado.
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[1] Luis M. Buch Rodríguez, Gobierno Revolucionario Cubano: génesis y primeros pasos, Editorial Ciencias Sociales. La Habana, 1999, p. 32.
[2] Luis M. Buch Rodríguez, Gobierno Revolucionario Cubano: génesis y primeros pasos, Editorial Ciencias Sociales. La Habana, 1999, p. 74.
[3] Luis M. Buch Rodríguez, Gobierno Revolucionario Cubano: génesis y primeros pasos, Editorial Ciencias Sociales. La Habana, 1999, p. 165.
Gabinete de Manuel Urrutia Lleó
Ministerio
Ministro
Primer Ministro
José Miró Cardona
Ministerio de Estado
Roberto Agramonte Pichardo
Ministerio de Justicia
Ángel Fernández Rodríguez
Ministerio de la Presidencia
Luis María Buch Rodríguez
Ministerio de Gobernación
Luis Orlando Rodríguez Rodríguez
Ministerio de Obras Públicas
Manuel Ray Rivero
Ministerio de Agricultura
Humberto Sorí Marín
Ministerio de Comercio
Raúl Cepero Bonilla
Ministerio de Educación
Armando Hart Dávalos
Ministerio de Trabajo
Manuel Fernández García
Ministerio de Hacienda
Rufo López Fresquet
Ministerio de Comunicaciones
Enrique Oltuski Ozacki
Ministerio de Defensa Nacional
Augusto Martínez Sánchez
Ministerio de Recuperación de Bienes Malversados
Faustino Pérez Hernández
Ministerio de la Ponencia y Estudio de las Leyes Revolucionarias
Osvaldo Dorticós Torrado
Ministerio de la Economía
Regino Boti León
Ministerio del Transporte
Julio Camacho Aguilera
Ministerio de Bienestar Social
Elena Mederos Cabañas
BIEN HACE MADURO LLAMAR AL DESLINDE. LA OPOSICIÓN NO ES BLOQUE DE ACERO
ELIGIO DAMAS
He leído recriminaciones, dirigidas a Diosdado Cabello por hablar de una oposición dividida “en seis rolos” y al presidente Maduro, como quien se hace a cualquiera que se le halló en la calle, porque llama a algunos sectores hasta ahora sentados alrededor de la MUD a deslindarse de quienes ensayan el modelo de golpe a lo Ucraniano. Se dice, no es esta una versión textual, sino aproximada, que la derecha es una sola. Es decir, es un bloque o estructura monolítica que actúa tal como está estructurada, conformada u organizada. Lo que no es más que la unión de una gente en torno a unas ideas generales, sobre todo contraria al chavismo e interesada en sacarlo del poder. Lo que implica decir que no hay coincidencias en torno al cómo, cuándo, con quiénes y para qué. La gráfica de una mesa con las cuatro patas remendadas es una excelente versión plástica de la MUD.
De acuerdo con aquella versión monolítica, que tiene el inmenso defecto de ser de humanos, inmersos en una sociedad de clases, el presidente estaría perdiendo el tiempo y haciendo algo que más gusta repetir – difícil saber por qué – a quienes así piensan, conciliando con sus enemigos o peor aún, con los del pueblo. Cabello por su parte, habría hecho un diagnóstico comprobadamente errado.
Puede ser que uno hable como aquel brujo por quien habló Víctor Morillo en una pieza musical de Billo Frómeta, “Yo digo lo que veo”. No obstante, el brujo hablaba, según su confesión, por lo que miraba, sabía por lo que le decían “sus búhos parlanchines”, mediante la observación y no lo que se craneaba para engatusar a su cliente.
Concebir la MUD como un bloque, en cualquier circunstancia, es un sofisma. Ella, es obvio, es un grupo policlasista o multiclasista, como gusta decir a un académico amigo nuestro, y siendo así, en una sociedad como la nuestra, parece elemental un desatino concebirla como bloque inexpugnable. En el chavismo mismo, no estoy descubriendo el agua tibia, las diferencias y hasta contradicciones son obvias. He leído en aporrea no sólo a camaradas que discrepan sobre asuntos muy puntuales de táctica y estrategia; lo que es más significativo para el asunto que nos interesa, a gente que se define al lado del chavismo y del “Plan de la Patria”, criticando a Maduro por no ceder a los requerimientos económicos de los grupos que dominan la economía, hasta en la exigencia de la suspensión de la medida de control cambiario y atribuir la “escasez” exclusivamente a las políticas del gobierno.
Sucede todo eso, porque el chavismo no es un bloque monolítico, una mezcla absolutamente homogénea y no puede serlo por dos cosas, porque es el producto de una sociedad de clases y en definitiva, está conformado por hombres, humanos. El motor de la sociedad, aquella que impulsa el movimiento es la contradicción y afortunadamente, “cada cabeza es un mundo”, siempre cada hombre, tendrá una visión diferente, en algún aspecto, desde cualquier ángulo, por la bendición de ser humano y no una máquina programada.
Ese chavista que piensa de esa manera, no necesariamente es un “infiltrado”, aunque puede lo sea y no tarde en marcharse, pero también es posible que frente a nuevas situaciones e influencias, cambie de posición.
Es improcedente descartar que del lado de la gente en la MUD o en la oposición para mejor decir, haya unos cuantos que discrepen de la idea del golpe y más aún de los actos de violencia.
Si nos ponemos a pensar en toda la complejidad del golpe que pasaría “inocentemente” por la renuncia de Maduro, los procedimientos constitucionales llevarían a los golpistas a llevarse la constitución toda por delante, pensando que a éste le sustituiría Diosdado Cabello, actual presidente de la AN. Como inmediatamente destituirle a él mismo, gobernadores, alcaldes, diputados y pare de contar. En la oposición, que no es bruta, se sabe bien de toda esa complejidad y embrollo nada fácil de superar. Ya Carmona lo intentó y sabemos los resultados.
Pero eso plantea otra reflexión. La derecha toda, sabe bien del enorme respaldo, si no todo, de que goza el chavismo en el ejército, en la calle y en área latinoamericana, del Caribe y de las relaciones inmejorables del gobierno con los de su entorno. ¿Qué hacer y cómo con eso para ejecutar ese plan?
Lo de Honduras fue simple. Las amaestradas instituciones y las Fuerzas Armadas se cuadraron rápidamente con la iniciativa gringa y eso se esperaba. Los países de Centro América se mantuvieron como observadores y Costa Rica, con Oscar Arias, actuó de Celestina. Lo de Allende, a quien se le ha recordado mucho por estos acontecimientos, se produjo en un marco nacional, internacional y económico, absolutamente diferente. Aun así, la derecha moderada bien sabe que al final tuvo que pagar las consecuencias de los abusos del pinochetismo. Ucrania tampoco se parece a Venezuela. Esto confirma que las copias suelen ser malas. Por algo dijo Robinson “inventamos o erramos”.
Estas circunstancias, o simples reflexiones, hacen pensar que las naturales diferencias en la derecha, cuya gama no deja de ser amplia, deberían agitarse y distanciarse más. Por lo que no es absurdo pensar que en ella puedan producirse distanciamientos y menos lo es, que el presidente hable de manera que procure acelerar ese proceso. Lo menos que podría suceder, es que los ultrosos recojan sus macundales en espera de otro momento y hasta puede que ese no se les dé
Llegará el momento de evaluar hasta dónde llegan las cosas. Hay elementos que no se perciben a simple vista, como el chantaje, el peso alcanzado por la presión de los factores externos con sus capitales, hasta el temor que suele apoderarse de la gente en estas circunstancias, pero de allí a simple vista, juzgar a la oposición como una argamasa por demás sólida, parece una posición simplista e interesada en llamar la atención o por simple deseo de no ser prudente.
En circunstancias menos complicadas, grupos políticos de derecha o izquierda, se han fragmentado. Porque aparte de ser formaciones de clases diferentes, lo son de humanos.
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Publicado por Eligio Damas para BLOG DE ELIGIO DAMAS el 2/15/2014 07:52:00 a. m.
LA INERCIA QUE NOS AHOGA LENTAMENTE
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From: Félix Sautié Mederos
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Sent: Thursday, February 13, 2014 8:18 AM
Subject: La inercia que nos ahoga lentamente, publicado en Por Esto! el sábado 15 de febrero dep 2014
La inercia que nos ahoga lentamente
Félix Sautié Mederos
Crónicas cubanas
Con el transcurso del tiempo, día a día la inercia lo va corrompiendo todo, ya sea nuestro físico y nuestra salud personal que se resienten seriamente con la falta de movimiento o incluso el ejercicio de nuestra voluntad para continuar viviendo, así como los equipos que no se usan y se rompen, incluyendo además muy especialmente a la sociedad y a cualquier manifestación de la vida sobre la Tierra. La inercia sostenida se asocia con la desesperanza y el conformismo para crear un círculo vicioso que cuando nos atrapa se hace muy difícil de romper y que puede entonces liquidarnos para siempre.
La inercia pues, es posiblemente una de las actitudes menos visibles que podemos adoptar, pero en mi criterio también una de las más perniciosas para la vida. Algunos podrían preguntarse sobre la razón por la cual escribo estas consideraciones, quizás filosóficas, al respecto de la inercia, y posiblemente se cuestionen mi motivación para plantearlo en los primeros tiempos del año 2014 que recientemente ha comenzado con ese paso inexorable que caracteriza al tiempo y que se nos hace imposible de detener. Yo les respondo antes que se lo pregunten; y les expreso que hace algunos días en la Basílica Menor de la Virgen de la Caridad del Cobre en Centro Habana a la que asisto regularmente como feligrés, el Rector del Santuario padre Roberto Betancourt en una homilía apasionada reclamaba con especial énfasis de los cristianos allí asistentes algo más en su vida espiritual que conformarse con la simple asistencia a las misas del domingo. Eso me hizo recordar la Epístola del Apóstol Santiago que expresa textualmente: Así la fe, si no tiene obras, está realmente muerta (Santiago 2, 17).
No me propongo reflexionar específicamente sobre la profunda importancia teológica de ese planteamiento del Rector del Santuario Occidental de la Virgen de la Caridad del Cobre en Cuba, ya he escrito algo anteriormente al respecto, pero sí quiero decir que me hizo pensar mucho en la realidad que me rodea, a la que considero que debería aplicar en una dimensión más amplia el reclamo planteado, porque el conjunto de las improntas que estamos viviendo los cubanos a la altura del año 2014 cuando se ha cumplido 55 años del proceso revolucionario socio político y económico de nuestro país, requiere de una superación radical de la inercia en la que nos encontramos enquistados, siempre en espera a la expectativa, en el mejor de los casos, de unos cambios y transformaciones que vienen de arriba; y que se realizan actualmente sin prisa pero con algunas pausas, todo lo cual coadyuva en mi opinión con las inercias y los conformismos. Tal y como se podría decir parafraseando un dicho muy popular en Cuba, viviendo empobrecidamente mientras que nos pasan por encima carretas y carretones.
Estoy de acuerdo con que las máximas responsabilidades de esta situación se encuentran en los enquistamientos de una burocracia política, económica y social que se auto defiende en retirada y que cada vez se hace más incapaz de romper la obsolescencia que nos invade por todas partes; pero también debo recordar que esa obsolescencia sostenida en sus contactos con la vida y con el mundo en general nos está emitiendo señales que podrían compararse con la cuenta regresiva de la autodestrucción que puede verse en los filmes de ciencia ficción antes de que se produzca el desenlace de la trama que se exhibe. No exagero, simplemente describo, aunque haya a quienes no les guste, lo que veo a mi rededor, lo que siento en mi interior, sobre todo en mi conciencia, y lo que me transmiten de una forma u otra, más o menos intensamente las personas con las que me relaciono así como los muchos hechos que se producen en mi entorno. No obstante, considero que no deberíamos cargar todas las culpas sobre esa burocracia que se está convirtiendo una especie de chivo expiatorio, a pesar de que exacerba nuestras inercias y nuestros conformismos culpables; pero que también podría decirse que puede equipararse con nuestra cuota de culpabilidad ciudadana y humana en sentido general que compite con el desdén y la desidia que caracteriza a cualquier burocracia sea de la índole que sea.
El último episodio de esta obsolescencia que se generaliza se manifestó en el béisbol, deporte que para los cubanos es muy importante y para muchos inclusive constituye parte esencial de sus vidas, en la recientemente terminada Serie del Caribe, sobre lo cual publiqué una crónica (1); pero no tendríamos que hurgar mucho en nuestra realidad nacional para encontrarnos manifestaciones de la más diversa índole con motivaciones y causas que nos afectan sensiblemente en todos los órdenes de nuestra vida espiritual y material. En este sentido debo aclarar que estoy de acuerdo en que hay responsabilidades determinantes pero en mi criterio eso no quiere decir que se anule por completo la responsabilidad personal que todos tenemos en estas cuestiones.
Pienso que una sociedad está enferma cuando no se asume por todos su corresponsabilidad alícuota con el desenvolvimiento y el devenir de las realidades por la cuales atraviesa, y en mi consideración personal debo decir que eso es lo que se está manifestando con fuerza en la nuestra. Así lo pienso y así lo expreso con mis respetos por la opinión diferente y sin querer ofender a nadie en particular, fsautie@yahoo.com
(1) Un llamado nos llega desde el béisbol: abrirnos al mundo, Publicado en POR ESTO!,
Sección de Cultura, el viernes 7 de febrero del 2014
.http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=33&idTitulo=305380
Publicado en la Sección de Cultura del periódico Por Esto! el sábado 15 de febrero del 2014.
http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=33&idTitulo=307005
Otro acierto de la II Cumbre de Celac
Otro acierto de la II Cumbre de Celac
Foro China-América Latina y el Caribe
Por: Hedelberto López Blanch | Lunes, 10/02/2014 05:39 PM
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La aprobación de un Foro de Cooperación entre las 33 naciones integrantes de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) con la República Popular China abre enormes espacios para el incremento del intercambio comercial y la inversión con el gigante asiático.
Durante la II Cumbre de la organización, efectuada en La Habana los días 28 y 29 de enero, los Jefes de Estado y Gobierno acordaron unánimemente establecer ese mecanismo de colaboración conjunta lo que les permite negociar proyectos que resulten beneficiosos para toda la América Latina y el Caribe, además de los acuerdos bilaterales que cada país desarrolla con China.
Inmediatamente de conocerse la noticia, el presidente chino, Xi Jinping realizó una declaración especial por medio de la cual elogió el acuerdo y significó que desde su nacimiento la Celac ha contribuido al fomento del diálogo y la cooperación, además de incrementar su influencia internacional.
Jinping dijo que su país esta dispuesto a realizar esfuerzos concertados con América Latina a fin de convertir al foro en una plataforma importante para el desarrollo de una asociación cooperativa integral que se caracterice por la equidad, el beneficio mutuo y el desarrollo común.
Datos de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) señalan que el intercambio comercial entre esta región y China se multiplicó en 30 % en los últimos 12 años al pasar de 12 000 millones de dólares en el año 2000 a 250 000 millones de dólares en el 2012.
En 2013, aunque aun no hay datos oficiales, esas cifras se incrementaron por los numerosos convenios efectuados.
El gigante asiático se convirtió en los últimos años en la principal fuente de crecimiento de las exportaciones de América Latina y el Caribe y ayudó a disminuir, y a resolver los graves problemas provocados por la crisis económica mundial, iniciada en 2008 en Estados Unidos, cuya metástasis se extendió a la Unión Europea y Japón.
En el pasado decenio, China representó una fuente de enormes oportunidades para el hemisferio sur americano, en especial las naciones que cuentan con abundantes recursos naturales y ahora los desafíos consisten en obtener inversiones de capitales necesarios para mejorar las infraestructuras, la agroindustria, la ciencia, innovaciones y los recursos humanos de la región.
Se hace fundamental diversificar las exportaciones y mejorar los intercambios comerciales para que hacia la nación asiática no solo vayan las materias primas, sino también productos elaborados que tengan mayor valor agregado.
En ese sentido, es preciso fomentar una aproximación estratégica de la región hacia China, que supere las limitaciones propias de los esfuerzos nacionales que han prevalecido hasta ahora, y donde entra a tomar parte directa, el recién creado foro.
Actualmente el comercio de China con Brasil, Chile y Perú supera a la de cualquier otro país, mientras hacia ese mismo resultado se encaminan Argentina, Venezuela, Bolivia, Ecuador, Costa Rica y Nicaragua, por citar algunos. Varios analistas señalan que en 10 años, Beijing se convertirá en el mayor socio comercial de América Latina.
Las inversiones y los intercambios con China permitieron la entrada de capital fresco y a la par disminuyeron la dependencia económica que los países de la región han tenido durante décadas de Estados Unidos.
Los convenios se extienden a disímiles ramas de la economía. Brasil, que concentra más del 50 % de esas inversiones, obtuvo un financiamiento de 10 000 millones de dólares para la petrolera Petrobrás; otros 1 200 millones para la compañías Vale, primera productora mundial de hierro que fabricará embarcaciones de gran porte; 5 000 millones para la construcción conjunta de una siderurgia y proyectos para una línea de trenes de alta velocidad.
La nación asiática, además de comprar grandes cantidades de alimentos a Argentina, acordó millonarios contratos para la construcción del tren rápido Buenos Aires-Córdoba; para la construcción de una planta de agroquímicos, una central térmica y un puerto comercial en la sureña provincia de Tierra del fuego.
A Venezuela le extendió un crédito por 20 000 millones de dólares para financiar 19 proyectos de desarrollo, y ya son más de un centenar los acuerdos bilaterales firmados que se extienden a las esferas de la economía, las comunicaciones y las ciencias. La República Bolivariana exporta hacia Beijing 600 000 barriles de petróleo diarios y próximamente la cifra excederá el millón.
La mitad de las exportaciones chilenas a Asia por cerca de 10 000 millones de dólares salen con destino a Beijing, cifra que casi triplica sus envíos a Estados Unidos, evaluados en 3 600 millones.
Perú ha impulsado en el último período su intercambio con esa nación a la que le vende numerosos productos como plomo, cobre, harina de pescado, molibdeno, estaño, frutas, maderas, químicos textiles y confecciones. Mientras ha recibido inversiones por 1 600 millones de dólares dirigidos al sector de la minería.
Con Ecuador y Bolivia se desarrollan colaboraciones principalmente en las esferas de los hidrocarburos, la minería, comunicaciones y cosmonáutica.
En cuanto a Cuba, el intercambio comercial se acerca a los 2 300 millones de dólares anuales y ese país pasó a ser uno de los principales socios de la Isla. En 2013 China aportó enormes grúas para la instalación de la terminal de contenedores en la Zona Especial de Desarrollo del Mariel.
Independientemente de los acuerdos bilaterales, con la conformación del Foro de cooperación China-Celac, sus 33 países miembros podrán adecuar políticas afines que les permitan impulsar el desarrollo económico y social de las comunidades en beneficio de los habitantes.
Actualizado 12:30 A.M. (hora local)
ACTUALIZADO
PERIODICO GRANMA DE CUBA
Actualizado 12:30 A.M. (hora local)
La Habana, sábado 15 de febrero de 2014. Año 18 / Número 46
Nota de prensa de la Sección de Intereses de Cuba en Washington
La Sección de Intereses de Cuba en Washington hace referencia a su comunicado del 9 de diciembre del 2013, por el cual se informó sobre un nuevo plazo otorgado por el banco "M & T Bank" para la conclusión de los servicios bancarios a la Sección y a la Misión Permanente de Cuba ante las Naciones Unidas. Entonces, se fijó el 1ro. de marzo del 2014 como plazo para el cierre de las cuentas, y el 14 de febrero como fecha límite para realizar depósitos.
A pesar de los ingentes esfuerzos realizados, debido a las restricciones vigentes, derivadas de la política de bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno norteamericano contra Cuba, ha sido imposible para la Sección de Intereses encontrar un banco con sede en Estados Unidos que asuma las cuentas bancarias de las misiones diplomáticas cubanas.
Por esta razón, la Sección de Intereses de Cuba se ve obligada a suspender los servicios consulares en la fecha de publicación de la presente nota, hasta tanto se restablezcan los servicios bancarios. Tal como fue informado en noviembre pasado, se atenderán solo aquellos casos con carácter humanitario.
La Sección lamenta los inconvenientes que esta situación causará a los ciudadanos cubanos y estadounidenses que requieren servicios de nuestras oficinas, con las consecuencias negativas que tendrá para las visitas familiares, los intercambios académicos, culturales, educacionales, científicos, deportivos y de otra naturaleza entre Cuba y EE.UU.
Washington, 14 de febrero del 2014.
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