ELIGIO DAMAS
Primer personaje: Uribe
El ex presidente colombiano, quien rompió con las habituales sutilezas de la diplomacia de la Casa de Nariño y asumió de la rusticidad y guapetonerìa de los mandones terratenientes y capos de la droga, acaba de darnos una muestra de amistad, buena fe al confesar su deseo de invadir a Venezuela. Gesto que descalifica el rol de pacificador que la gente de Primero Justicia le había asignado. Razón nueva para que Capriles de èl “no quiera acordarse.”
Leopoldo López, mano derecha de Capriles, cree que la “varita de virtud” para resolver con un “sutil” toque de magia lo relativo a la inseguridad en Venezuela, la tiene Uribe. Todos saben que este personaje es, no de armas tomar, sino de paramilitares mandar. Ellos, los Uribe y su gente, entienden que fuego se apaga con candela. Que eso de la inseguridad, los índices delictivos, se resuelve y rebajan solamente con plomo parejo. Por eso en Colombia, lo dice todo el mundo y centenares de periodistas, Uribe y su gente promovieron el paramilitarismo con varios fines igualmente macabros y como método contra la inseguridad en su país.
Colombia es un país en guerra y enguerrillado, donde las fosas comunes sirven de asiento a los abundantes sembradíos de drogas y todo ese espantoso cuadro, subsiste con el paramilitarismo y la violencia que golpea sin misericordia a los pobres. Es harto conocido por todo el mundo, las responsabilidades en un cúmulo de delitos de los funcionarios bajo el mando del ex presidente. Falta poco para que las autoridades colombianas establezcan el vínculo directo que lógicamente debe haber entre aquél y los delitos de los cuales acusan a sus subalternos y a los quienes defiende con energía. Hasta ahora, los gringos no han querido. Pero ese día llegará. No obstante, familiares suyos muy cercanos han sido acusados formalmente de graves violaciones a las leyes como el narcotráfico y los EEUU, específicamente la DEA, no le saca del puesto 82 de su lista secreta de los buscados o “en salsa”.
Desde que la cuñada y sobrina de Uribe fueron detenidas y sometidas a juicio, Capriles optó por no volverlo a mencionar y menos hacer alarde de su asesoría en el combate contra el delito.
El paisa, por su cuenta, tratando que le envistan de respetabilidad, se acerca a la frontera y declara cosas refritas, como sacadas del discurso de aquel Hoyos que, en su nombre, acusó en la OEA a Venezuela de proteger a la Farc, con una foto donde aparecen tres hombres haciendo un preparativo para asar un cochino o cerdo. Este no es Uribe, porsiacaso.
Segundo, tercero y cuarto personajes: Zapatero, Rajoy y Felipe González.
A Zapatero, del PSOE español, recién derrotado por ineficiente e incapaz de cumplirle a los partidarios de su propio partido y pueblo español, como Felipe González, les trajeron los amigos de Capriles que manejan un buen porcentaje del área financiera venezolana, para que les diesen clases a empresarios cómo se debe manejar la economía y hacer las cosas para que todo el mundo, sobre todo la mayoría de votantes, se sintiesen contentos. Le pagaron 30 mil dólares a cada uno, aparte de los gastos y dijeron lo que el FMI aconseja. Lo que a Zapatero llevó a la derrota electoral en España toda, dentro de su partido y al anonimato. Tanto que recientemente anunció su deslinde de la política. Felipillo, volvió a las andadas, callado y descangallado a hacer lobby para cuadrar unos negocios.
Rajoy, arrogante cual Aznar, como buenos fascistas de los rediles de Franco, está metido en un berenjenal muy grande, por sus políticas neoliberales y tanto que hoy es el hombre más repudiado en España.
Por eso, Capriles no les nombra. No le conviene. Piensa que mejor es andar solo que mal acompañado.
Cosa: Descalificar al CNE
La campaña opositora, desde la segunda contienda electoral que ganó Chávez, ha estado centrada en descalificar al CNE. Pese la seguridad del sistema, corroborada por centenares de observadores, técnicos, auditorías de todo tipo y la propia representación de gente de la MUD, siguieron diciendo que estaba montado un fraude y son tantas los defectos y grietas que, desde Miraflores, dada una orden de Chávez, se pueden modificar los resultados.
Vicente Díaz, integrante o rector del CNE por la MUD, asesorado por unos cuantos técnicos de su confianza, ha desmentido reiteradamente esos rumores echados a correr irresponsablemente y sin medir las consecuencias.
Pocos días atrás, el mismo personaje, publicó un artículo en el diario caraqueño El Nacional, plegado a la oposición venezolana, en el cual llama a votar con la seguridad que no hay posibilidad de fraude ni de vulnerar el sistema. Ese llamado, hecho en términos desesperados, se debe que a última hora, los “geniales” asesores del candidato opositor se han percatado que con aquella campaña habían fortalecido la tendencia abstencionista en su bando. Por eso mismo, hace dos días, un señor llamado Alì Manzur, identificado como Coordinador Adjunto de Primero Justicia (PJ), partido de Capriles, llama con angustia a su gente a votar porque “la confidencialidad del voto está garantizada”. Lo que es peor, absurdo o más cómico, acusa al gobierno “de propalar la especie que el sistema es inseguro, con la intención de promover abstención entre la gente opositora”. Es decir, acusa al gobierno de hacer lo que ellos, sin pudor ni discreción alguna, falsamente han denunciado ante el mundo; que el CNE, por orden de Chávez, manipula el sistema para cometer fraude y ello empieza por conocer por quién vota cada quién.
Por haberse dado cuenta a última hora, no que han venido mintiendo e intentando descalificar al árbitro, porque eso no les preocupa, sino de estar desalentando a sus aliados, Capriles no quiere hablar de la “vulnerabilidad”, por ellos inventada, de nuestro sistema electoral.
Todavía hay más cosas y personas de las cuales Capriles no quiere que se hable.
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Publicado por Eligio Damas para BLOG DE ELIGIO DAMAS el 8/14/2012 03:21:00 p.m.
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