lunes, 9 de julio de 2012

PARANOIA BUROCRATICA



----- Mensaje reenviado -----
De: Félix Sautié Mederos <felixsau@enet.cu>
Para: fsautie@yahoo.com
Enviado: Lunes 9 de julio de 2012 10:30
Asunto: Paranoia burocrática, publicado en el periodico Por Esto! el lunes 9 de julio 2012

Paranoia burocrática
Félix Sautié Mederos.


Crónicas cubanas


En Cuba, la paranoia de algunos que ven enemigos por todas partes, ha devenido un signo externo de los estertores de un proyecto socio político centralizado en su ejecución con evidentes manifestaciones de agotamiento. Escribo hoy sobre un problema agudo y complicado, más aún porque en los medios locales no es posible el derecho a replica que permita esclarecer de parte y parte las acusaciones que algunos se dedican a proliferar contra quienes opinen diferente. Es verdaderamente una manifestación de violencia contra la conciencia y el derecho de expresión, que da fundamento para las más agresivas expresiones perturbadoras del normal desenvolvimiento social. En mi criterio, forma parte de un doble rasero con el que se califican los derechos a la libertad de expresión en el mundo externo, porque mientras se destacan las luchas de los movimientos alternativos en otros países, en Cuba se le cierra espacio a cualquier opinión que no concuerde con el pensamiento oficial.

Es una situación que por días se hace más insostenible, junto con las prohibiciones absurdas vigentes con las que además medran funcionarios e inspectores; a lo cual se prestan muy especialmente los que podríamos denominar al decir del Che como “los alabarderos del pensamiento oficial”, entre los que se incluyen algunas personas que sin ser cubanas y sin vivir las realidades de nuestro país en los últimos 50 y tanto años, se dedican a darnos lecciones de cómo deberíamos comportarnos ante las ruinas, las incapacidades productivas, las burocracias y las corrupciones que ellos no viven y que como Saturno están carcomiendo por dentro los procesos revolucionarios y las ansias de un pueblo que ha luchado por lograr justicia social, equidad distributiva y paz.
Unos y otros que así actúan, en vez de prestarse como arietes desde posiciones de fuerza a esas artimañas, deberían tener el pudor de no justificar tanta desidia e inconsecuencias. Es triste su misión con la que adquieren una deuda impagable con la historia de un pueblo que lucha por su futuro. Es lamentable que deba expresarme con esta dureza porque para tales personas quizás no quepa ya el perdón por sus injurias, que una vez proferidas causan un daño indeleble de cuya autoría no podrán deshacerse. Pienso que lo mejor que pudieran hacer es mirar más objetivamente hacia las realidades de Cuba hoy que tanto perjudican con su controvertida agresividad. Pero parece que no tienen intención de detenerse y no cejan en aplicar sus violencias verbales como preludio de otras que pudieran ser más directas; utilizan para ello las tergiversaciones, las calumnias y las mentiras sin escrúpulos de ningún tipo. Sus acusaciones preferidas son las de estar al servicio del imperialismo; en tanto que por su conducta dan soporte a situaciones insostenibles de burocratismo, corrupción y falta de estímulos para el trabajo así como a sensibles limitaciones de las libertades de expresión, acceso a Internet, de asociación y de que los cubanos puedan viajar y/o regresar libremente a su país de nacimiento; que constituyen problemas que afectan a toda la población.

En los últimos días, en diversos medios de información oficiales y oficiosos-alternativos se ha comenzado una campaña en contra de la Red Protagónica Observatorio Crítico que agrupa un conjunto de proyectos socio políticos de izquierda; y además en contra de la publicación Havana Times. A ninguno de estos proyectos se le puede acusar de pro imperialistas, tal y como lo están insinuando e incluso profiriéndolo expresamente. Con ello, realizan una labor muy triste al descalificar e intentar dividir a la izquierda que no responde a sus intereses de mantener un sistema agotado que la población cubana ya no soporta y que se encamina hacia un restablecimiento de las más burdas y retrógradas expresiones del socialismo real ya fracasado y de un capitalismo de estado de nuevo tipo contentivo de las más primitivas formas de explotación del hombre por el hombre. Ellos no comprenden la urgencia de alcanzar la concordia, la paz, la real equidad distributiva, justicia social y efectiva participación de la población en los cambios, reformas necesarias así como en la eliminación de las prohibiciones absurdas que lo complican todo.
Considero que atacar indiscriminadamente a las entidades de la izquierda alternativa es “serrucharse el piso”, aunque quizás esas pudieran ser las verdaderas intenciones de quienes pretenden liquidar todo lo que queda del proceso socio político de 1959, principalmente lo que pudiera beneficiar a los trabajadores para, en cambio, dirigirse hacia un proceso que mantenga la explotación asalariada por parte del Estado y de sus beneficiarios.

En el documento sobre “La violencia en Cuba: pasado, presente y ¿futuro?”, publicado en el Boletín SPD que editamos los partidarios del Socialismo Participativo y Democrático entre los que me incluyo y asumo plenamente; y, que por demás, he estado comentando en mis dos últimas crónicas publicadas en Por Esto! (*), se ha planteado al respecto de estos problemas a que me refiero, que: “(…) No hay soluciones mágicas ni al parecer posibilidades de conseguirlo en unos pocos días; pero sí hay muchas maneras en que todos podemos contribuir a generar un espíritu contrario a la violencia y a sus manifestaciones. (…) Un aspecto que contribuiría a disminuir las tensiones, sería la eliminación de calificativos y epítetos denigrantes hacia las posiciones diferentes. Pero, básicamente, la creación de un clima de no violencia es responsabilidad principal de los que tienen el poder político-militar, económico, el control de los medios de divulgación, las escuelas y los centros de trabajo (…)”.

Los ataques contra los medios alternativos de izquierda a que me refiero se proponen todo lo contrario, ¿Hasta cuándo…? Así lo pienso, así lo asumo y así lo publico con mi mayor respeto hacia las opiniones diferentes. fsautie@yahoo.com

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