martes, 2 de octubre de 2012

ACERCA DEL NUCLEOLO DEL PODER




Conviene a toda sociedad el ser guiada por el lìder que ellos mismos escogieron para el mejor disfrute de todo lo que la vida les ofrece.êste Lìder llega serlo, por sus habilidades demostrada ante el conjunto de sus semejantes y por su caràcter indoblegable ante la adverdidad y los impidimentos que se levantan en el camino emprendido.
El lìder tiene, necesariamente necesidad de contar con todo el poder que le permita gobernar y guiar en todo momento a los que estan bajo su direcciòn y protecciòn.
êste poder,se supone emane del mismo pueblo que lo ha elegido o le ha pedido le oriente y le lleve al pleno goce de sus aspiraciones mas queridas.
Cuando el pueblo aumenta numericamente o en conocimientp,mayor grado de poder se necesitarà para ejercer un liderazgo eficiente y, como tambien aumentarà la diversidad del grupo y las apetencias diversas, se harà necesario una cuota mayor de poder,que aunque repartida entre una nueva clase de lìdederes subalternos, no podrà de ninguna manera ser un obstàculo al poder supremo del lìder escogido,ya que el nùcleo no podrà ser superior al nucleolo que le sirve de base fundamental.
A èstas consideraciones, se ha de añadir, que los pueblos,son por naturaleza de ànimo cambiante y por ello,es suceptible de dar cabida a toda suerte de disconformidades y por ende, a toda suerte de intrigas,despròsitos y suberciones,ya uque a todo poder constituido, le ha de salir al paso,como fuerza necesitante,la contradiciòn a lo ya existente,dando lugar a la lucha por el poder y, por esto,a la amenaza del desorden pùblico,al magicidio y todo lo que le es intrìnseco al ser social y la vida en colectividad.
El lìder tiene por lo tanto,o que aflojar, con inteligencia,como que cede poder, pero en la pràxis como no cediendo nada.Ya que los pueblos o sè gobierna por la fuerza o por la astucia, siendo lo primero el arma de los tiranos y lo segundo la fuerza de los estadistas que, por su ejercicio, han sabido comprender el meollo mismo del pueblo que tiene bajo su direcciòn.
La habilidad de saber mandar o de saber guiar a un pueblo, debe estribar en saber hasta que punto se tiene el mismo poder,hasta que punto el pueblo sigue confiando, y sobre todo, en saber si todavìa se puede esperar que la correlaciòn de fuerzas le son faborable, para el cambio prudente o para seguir el rumbo original emprendido.
El peligro mayor de un gobierno es subestimar a los que dentro de la sociedad se sabe que tienen tambien el deseo de ser entes protàgonicos capaces de llegar al poder por todo medio posible.Asì el lìder ha de ser dòcil pero no estùpido.condesendiente, pero no dèbil.
La mayor habilidad de un lìder, es saberse que no es eterno, ni su obra tampoco.Debe estar consiente que toda obra humana es finita, y que toda forma de gobierno es subseptible de ser cambiada imperativos del tiempo y de lo mudable de todas las cosas.

Sin dudas que el futuro no es otra cosa que la serpiente que se traga a la otra que no s otra cosa que el pasado perecible.El verdadero lìder sabe cual es su ùltima meta alcansable y desde la misma,le honra entregar la bandera al relevo generacional que serà capaz de seguir el camino hacia nuevos horizontes.

Rev Leonides Penton Amador

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