El éxito del Heberprot-P en Kuwait
Por Hedelberto López Blanch
El medicamento cubano Heberprot-P ya se utiliza en varias
naciones del planeta para la atención a los pacientes diabéticos con úlcera en
los pies. Recientemente, la Revista Progreso
Como se conoce, el Heberprot-P es un medicamento único y primero
en su tipo para la terapia de la úlcera del pie diabético que ha revolucionado
con éxito el tratamiento de ese tipo de complicación en los pacientes.
Esa medicina, netamente cubana, acelerara la cicatrización,
reduce las complicaciones derivadas, disminuye el riesgo de amputaciones y mejora
la calidad de vida de las personas afectadas.
“Cuando Ahmed Khaled Ghasem se
dirigió a mediados de enero a la Clínica Especializada
del Instituto Dasman para el Tratamiento de la Diabetes , adscrita a la Fundación Kuwaití
para el Progreso Científico, no estaba seguro de los resultados que iba a
obtener. Este paciente sufría de úlceras complejas del pie diabético, por lo
que todos los médicos que lo atendieron en los distintos hospitales le
informaron que la única opción era la amputación de la pierna derecha por
encima de la rodilla, así comienza el artículo de la escritora científica, Safaa
Kanj.
“Ahmed, de 50 años de edad, sufría de
diabetes tipo II desde hacía 30 años. El solo hecho de pensar que iba a perder
su pierna le causaba un dolor insoportable, era incapaz de dormir y se
preguntaba: ¿cómo me moveré, cómo realizaré mi trabajo y cómo continuaré con mi
vida con solo una pierna?
“Cuando el último galeno que lo
atendió le informó que la amputación era la única opción disponible, Ahmed le
preguntó casi sin esperanzas, si existía otra solución. El médico le respondió:
“Quizás; actualmente hay un grupo de investigadores en el Instituto Dasman para
el Tratamiento de la Diabetes
que aplican un nuevo medicamento, el cual se encuentra en fase de ensayos
clínicos y que posiblemente te pueda servir, ¿por qué no lo intentas?”
“Así, y a pesar de haber perdido casi
todas sus esperanzas, Ahmed se dirigió a esa clínica para probar suerte, pues
ya no tenía nada que perder y aceptó participar en los ensayos clínicos. Ahmed empezó
a recibir el tratamiento a principios de 2015, asistió a los ensayos tres veces
por semana. Después de 11 semanas comenzó a
observar la reconstrucción del tejido muerto de su pie.
Hace nueve meses, en junio de 2015,
entrevisté vía Internet al profesor Kazem Behbehani, reconocido inmunólogo, director general del Instituto Dasman para el
Tratamiento de la Diabetes
quien había participado en diciembre de 2014 en el III Congreso Internacional “Controlando
a la Diabetes
y a sus Complicaciones más Severas”, efectuado en La Habana.
Behbehani explicó que el Instituto fue
creado con el auspicio del extinto Emir de Kuwait, Jeque Jaber Al Ahmad Al
Jaber Al-Sabah e inaugurado el 6 de mayo de 2006 por el Emir de Kuwait, Jeque
Sabah Al-Ahmad Al Jaber Al-Sabah. Su misión principal es la prevención, control
y mitigación del efecto de la diabetes.
Informó que el número de pacientes
aumentan anualmente. Durante 2013, el Instituto recibió 21 036 pacientes; en
2014, se atendieron 25 375 personas y hasta el 6 de mayo de 2015 la cifra
alcanzó 11 559 enfermos sin contar los que acudieron a las clínicas docentes
por motivos de consultas. El Instituto presta atención a los residentes de
todas las nacionalidades y países.
Para Behbehani entre los resultados
más importantes que emanaron de la visita a Cuba, se destaca la firma de un
acuerdo para el intercambio de experiencias científicas y prácticas con el
Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de La Habana (CIGB). Un pequeño
grupo de médicos cubanos especializados en pie diabético laboran en
coordinación con un equipo de expertos del Instituto, y brindan tratamiento a
pacientes, utilizando para ello un medicamento cubano de probada eficacia
internacional, el Heberprot-P, aseguró el destacado científico kuwaití.
En el artículo de Safaa Kanj en la
revista Progreso Científico, aparece una entrevista a la Doctora cubana, Lianet
Rodríguez, participante en los ensayos clínicos, quien explicó que después de
76 días de tratamiento con factores de crecimiento humano recombinante,
mediante infiltración intralesional aplicada directamente en la zona de la
lesión, se completó el crecimiento del tejido conjuntivo y la granulación de la
herida, que es la tarea principal antes de la cicatrización y la recuperación
total.
Agregó la especialista asistente e
investigadora en Bioquímica, que Ahmed se sentía muy cansado, preocupado y
dolido en las primeras visitas, pero con el avance del
tratamiento y la atención esmerada de médicos y enfermeras comenzó a mejorar y
“sentimos una inmensa alegría cuando lo vimos caminar sin ayuda”.
Ahmed Khaled Ghasem, es uno de los 50
pacientes que participaron en los ensayos clínicos gráficos, fase 4 del medicamento cubano (Heberprot-P)
en el Instituto Dasman. Estos ensayos comenzaron en diciembre del 2014 y arribaron a su fase final en octubre de
2015.
Según datos preliminares de los
ensayos clínicos y teniendo en cuenta los pacientes que no pudieron asistir, el
porcentaje de éxito en la reconstrucción del tejido aglomerado ascendió al 95
por ciento, aseguró a la revista Progreso Científico, el Doctor cubano Rafael
Ibarguen, especialista en genética y encargado del estudio del fármaco
Heberprot–P en el Instituto Dasman.
Explicó el Doctor Ibarguen que el
Heberprot-P, es único de su tipo a nivel mundial, fruto del desarrollo de la Biotecnología cubana
y el más indicado para el tratamiento del pie diabético. En Cuba se registró en
el año 2006 y además se ha reconocido en
más de dos docenas de naciones y aplicado a más de 185 000 pacientes.
Según el artículo, debido al éxito de
los ensayos clínicos realizados en el Instituto Dasman, se trabaja en la actualidad para registrar el fármaco en
Kuwait.
En ese hospital, el tratamiento se
aplica a los enfermos utilizando oxígeno
a gran presión, y otros medios disponibles. Luego se aplica el medicamento
Heberprot – P, basado en un factor de crecimiento humano recombinante, mediante
la infiltración intralesional directa, repetidamente en el tejido dañado.
Según la investigadora Lianet
Rodríguez, “todos los estudios clínicos gráficos mostraron su eficacia en
diversos tipos de úlceras del pie diabético del tipo isquémica y neuropática”.
También se puede administrar el fármaco junto con otros tratamientos, en
especial con el oxígeno a gran presión. La investigadora aseguró que están
trabajando en diferentes frentes, pero sin contradicciones entre ellos.
Según el Doctor Ridel Febles,
especialista cubano en cirugía cardiovascular, que también participa en los
ensayos clínicos, se está trabajando en la licencia para el medicamento en
Europa, a través de la
Administración de medicamentos europeos, y se espera lograr
este objetivo durante el año 2016. Se han realizado ensayos clínicos con el
producto en más de 25 países, y ya está disponible para pacientes de numerosos
países del Medio Oriente entre los que pudiéramos mencionar Argelia, Libia y
Jordania.
Asimismo, se obtuvo la aprobación de la Oficina de Activos
Extranjeros adscrita al Departamento del Tesoro de los Estados Unidos para
llevar a cabo un ensayo clínico, luego de la aprobación de la Dirección de Alimentos y
Medicamentos de los Estados Unidos, con miras a su inscripción en ese país.
El articulo de Progreso Científico
describe que “Los ojos del Dr. Behbehani se humedecen cada vez que recuerda al
paciente Ahmed. Al verlo ya recuperado le estrechó su mano y lo abrazó. Por su
parte Ahmed le agradeció profundamente la atención recibida.
El Dr. Behbehani afirmó: “En el día
de hoy se humedecen mis ojos con lágrimas y no encuentro palabras para expresar
lo que siento, es realmente un hecho indescriptible, sobre todo por el éxito
alcanzado en los ensayos clínicos”, y añadió: “Estamos trabajando para
registrar el medicamento en Kuwait y esperamos que esté al alcance de todos los
pacientes que lo necesiten”.
Nota: Este artículo se realizó con información aparecida en la
revista Progreso Científico de Kuwait.
Destacado
Científico
El doctor Kazem Behbehani nació en Kuwait, estudió medicina en
las Universidades de Kuwait, Liverpool y Londres y recibió un doctorado en
Inmunología en 1972.
Realizó postgrado en la Escuela de Higiene y
Medicina Tropical y en el Instituto de Mathilda y Terence Kennedy de
Reumatología, ambos en Londres. En la Universidad de Kuwait, ejerció como profesor de
inmunología y enfermedades tropicales. También fue profesor visitante en la Escuela de Medicina de
Harvard y Director General Adjunto del Instituto de Investigación Científica.
Tras la invasión iraquí a Kuwait en
1990, salió del país y se unió a la Organización Mundial
de la Salud
(OMS), donde laboró en la investigación de una vacuna contra el VIH-SIDA, y se
convirtió, más tarde, en enviado Sanitario Internacional de esa Organización. Desde 2009 funge como director del
Instituto Dasman para el Tratamiento de la Diabetes.
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