lunes, 19 de octubre de 2015

?DE VERDAD A QUIEN PIDIO RENUNCIA JESUS SILVA , A CHITA O A MADURO

¿De verdad a quién pidió renuncia Jesús Silva, a Chita o a Maduro? Eligio Damas -“¡Caíste por inocente!” El 28 de diciembre es el día de cuando Herodes hizo matar a buena cantidad de niños nacidos en Belén, para hacer desaparecer con todos ellos a alguno que pudiera ser Jesús de Nazaret. Una como habitual práctica de la reacción de cuando una idea prende; para apagarla hay que hacer tabla rasa, quemar hasta las cimientes para que aquello no vuelva a resurgir. Pocos días atrás, denunciaba un personaje que vivió el horror de la represión pinochetista en Chile, que escuchó a uno de esos agentes policiales decir, refiriéndose a los niños, “matemos a estos que mañana serán comunistas”. Hice mención al día de los inocentes porque recuerdo aquel juego, del cual hasta la prensa se hace eco, de hacerle caer a uno por inocente inventando cosas hasta insólitas. Caí por inocente, hoy mismo mediados de octubre, cuando el columnista, de muchos títulos, según él mismo exhibe, Jesús Silva, contra quien no tengo nada, salvo diferencias sobre algunos enfoques y sobre todo de estilo, colocó en aporrea un artículo titulado “30 millones de venezolanos lloramos por un jefe que se niega a renunciar”. Ese ejercicio subliminal del columnista, habiendo sido publicado el artículo en Aporra, le atrajo, como lo esperaba, una muy significativa atención de lectores, mucho más de lo habitual. Tratándose de un “abogado, profesor universitario y hasta constitucionalista”, y alguien quien en los últimos meses ha estado muy prolífico criticando al gobierno, cosa que no censuro porque también a un poco de ese le meto, aunque tanto él como quien esto escribe, somos solidarios con el proceso bolivariano, es para llamar la atención ese título, más si el artículo está inserto en la página que antes mencioné. Le abrí de inmediato, sin hacer la revisión previa que acostumbro porque me impactó. Imaginé a Jesús Silva R., pidiéndole la renuncia al presidente Maduro y sobre todo ahora a no muchos días de un trascendente proceso electoral. Pero es más, cuando leí los dos párrafos que siguen, me sentí más atraído, alarmado o mejor muy interesado en saber las razones que daría para justificar ese pedido y sobre todo su conducta. Dijo el personaje “de marras”, como gustaba decir a mi hermano y compañero Moisés Moleiro: “Muchos malintencionados dijeron que yo tarde o temprano diría estas palabras y tal vez tuvieron la razón. Eso no me importa.” “Es más, los sucesivos fracasos de los últimos meses me han hecho pensar que este caos sólo lo puede enderezar un poder extranjero.” Luego, lo tengo que decir de manera poco sutil lo que no está en mi estilo, me sentí defraudado y más que eso, engañado. Víctima de un vulgar ardid publicitario para venderme un caramelo de mal gusto. Creo que Silva se engañó a sí mismo. Posiblemente dijo algo que piensa y no encontraba la forma de plantearlo. El sólo hecho de valerse de esa argucia, plantear un cuadro lleno de sugerencias e indirectas, intentando asociar una situación a otra, sabiendo la reacción del lector, no precisamente desprevenido, dice todo lo que está estampado aunque “se vista de cura”. Si se atreve a decir que no fue lo que quiso decir, conociendo sus lectores su nivel de inteligencia, “erudición, nivel académico”, entonces concluiríamos que se ríe de nosotros. Pero veamos las circunstancias. El estar ahora descontento por la gestión del gobierno, como es el caso de los camaradas que militan en “Marea Socialista”, y digo esto para dejar claro que me refiero a quienes han estado y están en el bando revolucionario y hasta antimperialista, no justica el sólo pensamiento de pedir o desear que el presidente Maduro renuncie y eso, aunque mañana lo va a negar, lo sugiere el compatriota Silva. Esta agrupación se fue del Psuv, ha pedido “contraloría pública” y hasta que el presidente se deshaga de su tren ministerial y otras tantas cosas que ahora no vienen al caso. Quien esto escribe, también viene pidiendo eso que ellos piden. Sólo que seguiré con el Psuv por ahora y el 6D votaré por sus candidatos, aunque como solemos decir, “sea lo último que haga”. Pero apenas sugerir que renuncie el presidente Maduro, y hacerlo desde el frente revolucionario, sólo para que a uno lo lean es grave. Pudiéramos hablar hasta de narcisismo, pero lamento haber dicho esto, pues no quiero desviar la atención y como antes dije, no es mi estilo. Es una consigna inherente a la derecha porque, que ese pedido le sea satisfecho, le ahorra a ella trabajo, mucho dinero y hasta pudiera colocarla en el poder. Mi condición docente, mi compromiso que es muy serio me impide hacer esos ejercicios de magia, de enredo verbal o manejar situaciones para como dice el Chavo, decir lo que se siente “sin querer queriendo”. Es grave el daño que eso hace. Pensar en esa posibilidad y manejarla truculentamente es ya, sin duda alguna, no un salto de talanquera, todavía no, pero sí un engaño e intento de generar cizañas, enredos y hasta desviaciones en el frente revolucionario, que no tiene necesariamente que ser madurista. Es más, le hace el juego a la derecha, con lo que no quiero caer en el simplismo de sugerir, aunque sólo sea eso, que Silva saltó la talanquera. Por ahora sólo pienso que “intentó hacer una gracia y le salió una morisqueta” El asunto de San Vicente tampoco merece ser tratado de esa manera porque, quien así lo hace pierde respetabilidad entre la gente seria y sobre todo entre los amantes del fútbol, que se ven tratados inadecuadamente, al mezclar un asunto estrictamente deportivo con la política, aunque se diga que esa no fue la intención. Además, pese a las deficiencias que pudiera haber en San Vicente como estratega, Silva le trata con muy poco respeto. Lejos de parecer el docente universitario, sugiere alguien de poca pertinencia. Pero aquí nadie se chupa los dedos. -- Publicado por Eligio Damas para BLOG DE ELIGIO DAMAS el 10/14/2015 03:12:00 p. m.

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