?ES DAVID RIVERA PRISIONERO DE SU PROPIA VERDAD?

Miercoles, Mayo 02, 2012 Semana: 26/Abr - 2/May/2012 Buscar progreso-semanal.com Alvaro F. fernandez EditorUnase a nuestro boletin semanal ¿Es David Rivera prisionero de su propia verdad? Por Álvaro F. Fernández alvaro@progresoweekly.com This e-mail address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it En circunstancias normales, David Rivera probablemente estaría enfrentando la posibilidad de una condena a prisión en base a la información divulgada por el Departamento de Cumplimiento de la Ley de la Florida (FDLE), la cual apareció recientemente en The Miami Herald. Pero David Rivera es un político. Y como ex miembro de la legislatura de la Florida está protegido por una ley promulgada en Tallahassee que fija el estatuto de limitaciones en dos años para persona como David que hacen mal uso de fondos políticos. La ley es diferente para el resto de nosotros. Según Fred Grimm, de The Miami Herald, en la Florida el estatuto de limitaciones para no políticos que cometen delitos financieros es de tres a cinco años. Bien que saben cubrirse la espalda los muchachos y muchachas en Tallahassee de manera que sea casi imposible procesarlos por robarse el dinero. Como dice Grimm en su columna, “Un límite de dos años, dadas las complejidades de la búsqueda en los registros de campaña, prácticamente inmuniza a un político contra un proceso legal”. Así que ahí lo tienen. A no ser que el gobierno federal haga un mejor trabajo que el estado, David Rivera seguirá en libertad. Actualmente el FBI y el IRS están investigando la participación de Rivera en un pago de $510 000 dólares realizado por el Cinódromo Flagler a la madre de David y su socia mientras él era representante estatal en la Florida. Según reportes de The Miami Herald en base a memos de la FDLE, estos son tan solo unos pocos actos de malabarismo perpetrados por David Rivera: Sus jugosos y gananciosos negocios de dos por uno: Mientras se desempeñaba como su propio tesorero de campaña, Rivera es acusado de facturar por duplicado a su cuenta de campaña y a su cuenta legislativa de viajes. En otras palabras, una factura paga la otra… Bueno, decidan ustedes a dónde fue a parar ese dinero. A menudo Rivera usaba fondos de campaña para pagar gastos en sus tarjetas personales de crédito. (No es de extrañar que después de que toda esta información saliera a la luz, a David le cueste tanto trabajo recaudar donaciones de campaña.) Está el caso de $175 000 dólares en donaciones políticas que Rivera NUNCA reveló. Permítanme explicar, si no está registrado en los libros, ¿dónde creen ustedes que terminó ese dinero? Y está Esther Nuhfer, amiga cercana, cabildera y “asesora de campaña” a quien la campaña de Rivera pagó $250 000 y días más tarde ella retiró $190 000 EN EFECTIVO de sus cuentas de negocios. Me pregunto, ¿habrá sido ese “retiro menor” un dinero que ella necesitaba tener a mano para sus compras en el supermercado? ¿Qué me dicen del caso de la madre de Rivera, la cual recibió pagos por cientos de miles de dólares por trabajos que Rivera hizo en el Cinódromo Flagler? Supongo que David prefirió que la gente no supiera que él estaba cobrando por un trabajo hecho en beneficio de los intereses de juegos de azar en la Florida –mientras era legislador estatal. Por eso es tan interesante que un cheque de administración por más de $95 000 endosado por su madre se esfumara rápidamente. Traten de hacerlo –desaparecer casi $100 000… Uno puede escribir una novela de Carl Hiaassen basada en los chanchullos de Rivera y probablemente algunos coincidirían que ese tipo merece pasar algún tiempo tras las rejas. Pero en mi caso, me importa poco si va a la cárcel o no. Lo que no me entra en la cabeza es el hecho de que la gente en Miami pueda seguir votando por este tipo. ¿Somos estúpidos? Por último, comprendo a los que insisten que David merece unas muy necesarias vacaciones en prisión. Pero si es cierto lo que los reportes noticiosos y los memos policiales señalan, entonces Rivera ya está encadenado a algo mayor que una reja de hierro. Y eso es su incapacidad para aceptar quién es. Sobre la base de lo que se ha escrito últimamente en la prensa acerca de nuestro delincuente congresista en residencia, ¿pudiera ser gay David Rivera? Y si lo es, al fin he encontrado una razón para compadecerme del HP. Y no por la especulación de si es gay. Vamos, David, estamos en el 2012. No tiene nada de malo si sigues tus inclinaciones. Es solo que un memo escrito por el Departamento de Cumplimiento de la Ley de la Florida (FDLE) da la impresión de que David Rivera considera que él debe engañar a sus seguidores republicanos conservadores. El memo del FDLE dice que durante su investigación de Rivera, él les dijo que como “hombre soltero haciendo campaña como un conservador político, fue necesario asistir con acompañamiento femenino a eventos relacionados con la campaña”. En otras palabras, David no quiso que sus electores se llevaran la impresión equivocada. ¿Y cuál pudiera ser esa impresión, David? Que no le importa que piensen que él es un ladrón, pero en cuanto a lo que él equivocadamente define como su masculinidad… Progreso Semanal/Weekly autoriza la reproducción total o parcial de los artículos de nuestros periodistas siempre y cuando se identifique la fuente y el autor.