NO TE FUISTES COMANDANTE

NO TE FUISTE COMANDANTE. SIGUES PEGADITO A NUESTROS CORAZONES. Hoy a los dos años de tu siembra, mi querido Comandante, sigues tan presente en el corazón de tu pueblo y de los pueblos del mundo. Llegaste a nosotros con el pensamiento liberador y el amor, más grande que hayamos sentido en nuestro día a día. Hoy, aunque peleo por que no salgan esas lágrimas que amenazan con desbordarse, me siento tan fortalecida y reivindicada por todo lo que nos dejaste. Tu sueño se volvió el grito del mundo. ¡UNIDAD! ¡UNIDAD! ¡UNIDAD! ¡JUSTICIA! ¡JUSTICIA! ¡JUSTICIA! Hoy muchos pueblos llevan tu mensaje en sus mentes, en sus almas y en acción. Jamás habíamos tenido a un hombre, al cual pudiéramos decir que es nuestro Líder. No es fácil, Comandante, decir, en estos momentos, en que las Potencias Imperialistas atacan las mentes y los corazones. Estoy segura que saldremos airosos porque nos enseñaste a querer a nuestros Ancestros Patrios. Nos diste la oportunidad de volver a tener Dignidad. Removiste los corazones de los que habían sido apagados y maltratados. Volvimos a ver una luz en nuestro sueño de pueblos libres. Fuiste más que un padre, más que un Presidente. Fuiste amigo de todos, maestro del mundo. Compañero inseparable del necesitado. Me diste, en lo personal, la fuerte decisión de seguir adelante en mis estudios. Sólo tú pudiste lograr eso en mí. Mira que llevé bastante rejo por no tener incentivo para estudiar. Llegaste con tus maravillosas Misiones y fui una de miles que se enganchó y dedicó su crecimiento educacional a tú obra. Comandante amigo sigues en nuestros corazones. Llegaste para quedarte y germinar en ellos. Te aseguro que las semillas están en pleno crecimiento y ya se han visto sus frutos. ¡No araste en el desierto! Siempre hubo tierra buena en esta Patria, solo hacía falta un buen Agricultor de Dignidad, Honor, Patriotismo, Coraje, Amor a nuestra tierra y es por eso que tus semillas cayeron en tierra fructífera. No te fuiste, jamás lo harás. Quedaste muy pegadito a nuestras conciencias y a nuestro amor a Venezuela. Seguiremos tus enseñanzas y más pronto que tarde veremos levantarse las banderas de la Soberanía, de la Democracia y del Bolivarianismo. ¡¡HASTA SIEMPRE COMANDANTE!! Carmen Pacheco carbeatriz@hotmail.com 5 de marzo de 2015