Subject: Una experiencia importante
Date: Sun, 21 Oct 2012 18:44:32 +0000
Una experiencia importante
Por Yndamiro Restano
En este minuto, he leído que Roberto Bahamondes transitó a otra dimensión. Bahamondes era un ser humano de gran sentido ético y un amante de la libertad, que Dios le ilumine y le colme de amor. Precisamente, Bahamondes fue el primer disidente que se postuló en las elecciones del Poder Popular a nivel de circunscripción. Fue una experiencia muy interesante que yo cubrí como periodista independiente. En aquel tiempo, las elecciones a nivel de base eran a mano alzada. Entonces, Bahamondes, como no había nadie que lo propusiera para delegado, se autopropuso. Yo, por supuesto no podía, porque mi registro de direcciones estaba en el Vedado. La asamablea se celebró en la frontera entre Juanelo Y Lawton, esa zona muy popular pertenecía al municipio de San Miguel del Padrón. Era la época de Abrahantes y la asamblea electoral se celebró rodeada de patrullas de la Seguridad del Estado y desde distintos ángulos, la seguridad filmaba videos. Lamentablemente, la asamblea duró muy poco, porque Bahamondes fue interrumpido por quien presidía la mesa, quien ofendió al disidente. Bahamondes que era una persona integra le ripostó la agresión verbal al presidente y se produjo un acalorado debate. La mesa logró calmar los ánimos, se hizo una votación de urgencia y como siempre la asamblea por unanimidad votó a favor del delegado oficial.
Entonces, fuimos para casa del disidente y acordamos escribir a la Asamblea Nacional del Poder Popular y pedir otra reunión, por lo que había sucedido. Esperamos varios días y sorpresivamente autorizaron la segunda asamblea. Obviamente, ya Bahamondes contó con una persona que lo propuso y a mano alzada, esto es importante, el disidente sumó varias docenas de votos. No recuerdo exactamente las cifras, pero fue un número considerable de votos, aunque perdió por estrecho margen. El candidato oficial, un retirado del ministerio del interior, ganó por unos cuantos votos y una cantidad se abstuvieron.
Aquel fue un hecho trascendental. Ya la disidencia contaba con un líder que tenía una base social indiscutible. Se había puesto en práctica, a pesar de todo, una vía política para intentar salir del totalitarismo. Pero, la mentalidad represiva quería ganar no solamente en las urnas, sino que quería hacer sufrir al disidente para que el terror siguiera dominando el trasfondo de la vida política de la barriada. Entonces, aquella pacífica y constructiva experiencia, terminó en un trabajo sucio y se llevaron preso a Bahamondes y lo acusaron de ejercer como fotógrafo ilícito. Fue en 1989, el año que el comunismo se cayó, fusilaron al General Ochoa junto a otros oficiales y Abrahantes murió preso.
Han pasado los años y acciones legales para desmantelar la verticalidad concentrada en un conciliábulo de poder, han sido llevadas a cabo por honorables disidentes y han dado resultados. Sin embargo, la idea estratégica de que la oposición y la disidencia utilicen las urnas masivamente para desmantelar el totalitarismo desde abajo, no ha logrado cuajar entre los demócratas opositores.
Hace unos momentos, supe que Roberto Bahamondes, el ingeniero, el esposo, el buen padre, el disidente constructivo, había muerto: Bahamondes fue un precursor: Que en paz descanse.
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