DERECHO A LA DEFENSA DE LOS DERECHOS

De todas las formas de vida conocidas,la humana es sin duda alguna,la superior,esto es, tratandòse de este plano vivencial nuestro,como mundo fenomènico definido actual.Nuestra superioridad es màs que evidente,no tando en fuerza bruta,sino en inteligencia,en astucia,raciocinio y, conocimiento de nosotros mismos como entes individuales è insuperbles.
Tenemos capacidades ilimitadas para la garantia de nuestra supervivencia y preservaciòn.Sòlo nos basta poner en funcionamiento nuestros recursos naturales,como el pensamiento, la refexiòn y determinaciòn de un hacer consiente,para que cualquier obstàculo que amenace nuestra existencia y conservaciòn,sea quitado del medio sin miramiento alguno.

En virtud de lo que estamos diciendo,no nos cabe duda alguna de el lugar que ocupamos entre los demàs seres vivos,que,como hemos dichos nos son inferiores en todo sentido,Domamos la fuerza bruta del caballo,la astucia del felino,la impetuosidad del elefante,y sin duda,tambien a todas estas fuerzas unidas.Sin duda somo superiores a todas ellas.

Pero este hombre,que parece ser el centro de todas las cosas,el invencible,el super ser de la creaciòn de Dios,tiene un enemigo mortal,siempre presente,que puede ser capàz de reducirlo a la nada,de convertirlo en un vil gusano o en la negaciòn de de la vida misma.Este enemigo es nada màs y nada menos,que èl mismo.

El hombre lleva en si mismo el gèrmen de su propia destrucciòn y,por lo tanto hemos de prestar atenciòn todo aquello que sea parte de nuestar naturaleza humana.Ya de desde mucho tiempo se dijo·Conòcete a ti mismo" y èste oràculo de Delfos,sigue con una viencia asombrosa,ya que hasta la fecha no henos logrado penetrar hasta las profudidades del alma.Todos los estudios de la psicologìa se han quedado cortos y,de cierto andamos en pañales en esto del conocimiento de nosotros mismos.

Este ser complejo y ùnico,sin embargo no puede valerse pro sì mismo.Al igual que otros seres necesitamos el accionar solidario de los demàs.Tenemos,por cierto,un crecer lento y llenos de peligros hasta nuestra adultès y, aùn en ella.seguimos indefensos la mayoria de las veces.

La naturaleza nos dotò pues, de la habilidad de vivir en compañia con aquellos seres que no son iguales pero,con todo ello,el màs fuerte se impone sobre el màs dèbil del grupo.el màs inteligente ,deviene en jefe,lìder y guìa de la comunidad.

Nace `por lo tanto el lìder,que ha de regir y dirigir al grupo,y èste se le subordina por fuerza o por necesidad y con el tiempo,al crecer el grupo,surge la necesidad de las leyes conductoras de la conducta tanto  individual como social, y seguido.las reglamentaciones que interpretan para los demàs lo que el grupo debe saber para gozar de estabilidad de su vida.

Esta sociedad con sus leyes y reglamentos,està encaminada a dejar su huella atravez de los tiempos,y sus miembros son a la vez que partes indisolubles de resto, tambien sujetos individuales que han de acatar las pautas establecidas o de lo contrario,ir en busca de otras agrupaciones que le den màs satisfacciòn de vida y bienestar en todo sentido.

Este patròn, es el que se sigue hasta el dìa de hoy,`puestos los pies,sobre los dichos de Montesquiu,de Rossou, de Litre,,de Marx o de culquiera que se halla ocupado de estos asuntos.El hombre en su devenir històrico o se queda o se và,pero siempre en tesitura de la bùsqueda de su mejorìa .Por lo tanto no hay fuerza capàz de domesticar al ser humano al punto de introyectar en su conciencia el concepto de petrificaciòn social,o de la leyes o de la eperanza de mejoramiento humanos.
La vida es un movimiento constante hacia una meta lejana o cercana pero avisora de nuevas realidades vivenciales que prometen ser mejores que las ya alcanzadas.Esa insastifacciòn inherente y concomitante es la fuerza propulsora de todo desarrollo social y de todos los tipos de logros que anuncian un cierto grado de felicidad alcansbles.Por ellas el hombre està siempre dispuesto a luchar y, pòr ellas lucha.

La felicidad totalmente alcanzada no es otra cosa que un freno a todo ulterior desarrollo.Como decia Mario Kuchilan,"cada meta es un nuevo punto de paertida"
Asì pues, las sociedades y los gobiernos todos son perfectibles, ya que todos son incompletos e imperfectos en sì y de por sî.Nadie pues nos puede vender la idea de que ya tiene la ùltima palabra en cuanto a una filosofìa de gonbierno.ya que ser el ser humano un sujeto cambiable lo es tambien, sin duda, todo lo que concibe en un momento dado de su historia.

Si el filòsofo dijo,"yo soy yo y mios cisrcunstancias," y si esto es cierto,entonces, la vida no es otra cosa que la metabolizaciòn de todo lo que nos afecta directa e indirectamente,conformando nuestro ser social pero en tesitura de racionalidad consiente,como sujeto activo de la historia.Es por lo tanto,el hombre como ente pensante, el que dirije con su acciòn a aquellos cambios que le son necesario para su adecuaciòn en su àmbito situacional.

Cuando los lìderes olvidan estas sencilas premisas, y se dan a la tarea de ,como dijo, Mella,"goberanr por decretos"o "ensima de los hombros del pueblo" como dijo Josè Martì,entonces, surgen las dificultades que pueden llegar al punto de la no posibilidad de vencerlas.·Los muelles de mi Carreta"se han d eengrasar de tiempo en tiempo, y se han de hacer por consiguiente, los cambios que los tiempos requieren.El no hacerlo, es como apunta la mitologìa a la muerte de nuestros propios hijos,al pie de una esperanza que no acaba de llegar....

Rev Leonides Penton Amador.

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