PRIMARIA Y LAS PRIMERAS ESPINAS

Primaria y las primeras espinas
Por Lorenzo Gonzalo, 19 de enero del 2012

Candela!!!! Diría un cubano.

Según acabamos de conocer, Mitt Romney, el aspirante a la candidatura presidencial por el Partido Republicano, paga impuestos equivalentes al 15% de sus ingresos. Dicha cifra es muy inferior a la pagada por quienes devengan salarios de 50,000 y 75,000 dólares. Las personas comprendidas dentro de este promedio de ingreso constituyen a penas un 30% de la población y a pesar de pertenecer a un número tan privilegiado, deben luchar duramente para sobrevivir a las dificultades de costear los gastos de una vida que les permita, entre otras cosas, atender a sus hijos y enfrentar los gastos médicos y los diversos seguros que se imponen. Más del 60% de la población percibe menos de esos ingresos, lo cual nos permite concluir que sus salarios y beneficios nunca resultan suficientes, para vivir a la altura exigida por las circunstancias de la sociedad donde viven. El estilo de vida de las grandes fortunas se impone y el mimetismo de pensamientos controlados por el bombardeo de una propaganda feroz, inclinan inútilmente a imitarlo.

La divulgación de esta noticia por las maquinarias política de los aspirantes contrarios a Mitt Romney, puede ser que le cause problemas en la Primaria de Carolina del Sur y luego en Florida.

El tema del pago de impuestos y los vericuetos legales que acompañan su regulación, han sido objeto de crítica por los sectores más afectados como consecuencia de las desigualdades económicas y por aquellos conscientes de que solamente una sociedad en armonía puede prosperar y sobre todo garantizar verdadera paz.

El Presidente Barack Obama ha sido un fuerte crítico del sistema impositivo de Estados Unidos y sin dudas que si Romney resulta electo candidato, este punto seguramente se va a convertir en argumento de ataque por parte de los demócratas. Lo que no sabemos con precisión es cómo Newt Gingrich y Rick Santorum moldearán sus campañas para usar este agujero aparecido de pronto en la biografía de Romney, quien sin dudas pretendía ocultarlo mientras durasen las elecciones a la candidatura por su Partido. Hace varios días que el resto de los aspirantes insisten en que presente su declaración de impuestos y mientras tanto, Romney ha recurrido a tácticas dilatorias, con el evidente interés de posponer dicha información.

Otra cuestión que ha surgido en esa ofensiva de los aspirantes republicanos contra Mitt Romney es la aparición de cuentas bancarias de sus negocios en las Islas Caimán Grande. De todos es conocido que dichas islas se usan como paraíso fiscal para evadir impuestos y para esconder fortunas. De esa actividad bancaria se nutre precisamente la economía de esas islas.

En medio de un escándalo que sin dudas moverán algunos de los cimientos de la campaña de este fuerte contendiente a la candidatura presidencial republicana, aparece Warren Buffet, el curioso multimillonario, que siempre ha minimizado la grandeza de su fortuna, aduciendo que tiene más de casual que de genialidad e insinuando que en sentido general, esa ha sido la norma de todas ellas.

El famoso millonario acaba de declarar que enviará un cheque de 45,000 dólares al Tesoro, como contribución para ayudar a disminuir la deuda del país.

Hace un tiempo atrás, cuando los republicanos comenzaron a sabotear las propuestas de la actual Administración para que se legislase una reducción sustancial de la deuda durante los próximos diez años, Buffet declaró que los ricos debían pagar más impuestos como agradecimiento a un país cuyo sistema les ha posibilitado sacarse tamaña lotería. En ese momento Mitch McDonell, líder de la minoría republicana en el Senado, declaró que si Buffet consideraba tal cosa, debía comenzar por enviar un cheque al Tesoro.

Como respuesta a ese desafío del Congresista, Buffet dijo que contribuiría con un dólar por cada uno que pagaran los miembros del Congreso y en el caso particular de McDonell, estaba dispuesto a ofrecer tres dólares por cada dólar que dicho Congresista aportase.

Enterado que el Representante republicano por Virginia Scout Rigell, había contribuido con 45,000 dólares durante los años 2010 y 2011, procedió a ser consecuente con su propuesta y ofreció una cifra semejante.

El cheque no será enviado hasta el 20 de Abril de este año 2012, en espera de que algún Congresista se anime a dar también su contribución, en cuyo caso Buffet estará obligado moralmente a igualarla.

Esta noticia, aunque en apariencia desconectada de la campaña Primaria de los republicanos, se suma al escándalo sobre los manejos financieros de Mitt
Romney y a su “violación legal” del pago de impuestos, precisamente porque la misma coloca en el tapete nacional el tema del pago de impuestos, que desde hace un tiempo hacia acá, se ha convertido en un asunto álgido y de mucha importancia para el electorado estadounidense.

El escándalo provocado con la noticia de que el más fuerte aspirante republicano a la candidatura presidencial, solamente paga impuestos por un monto equivalente al 15% de sus ingresos, cuando personas de clase media baja, con muchísimos menos recursos para circunvalar las regulaciones impositivas, pagan entre un 25 y un 31 por ciento, es quizás presagio de un nuevo debilitamiento del Partido Republicano en las elecciones generales de noviembre.

Veamos primeramente cómo inciden estos acontecimientos en el desarrollo de la Primaria Republicana.

Por lo pronto nada de lo ocurrido ayuda a ese Partido para vaticinar que pueda ganarle al Presidente Barack Obama en las elecciones de Noviembre del año 2012.

El otro contrincante fuerte, Newt Gingrich, quien pudiera resultar electo en lugar de Romney, podemos anticipar que ha quedado descartado, porque su segunda mujer acaba de declarar que Gingrich durante el matrimonio de ambos sostuvo relaciones íntimas amorosas en el apartamento de ellos en Washington, en la misma cama, durante años, con su querida de entonces, actualmente su nueva esposa. Cuando el asunto se hizo conocido de ella, Gingrich le ofreció que optaran por un tipo de “matrimonio abierto”, de manera que Callista (su actual esposa) ella y Gingrich pudiesen convivir. Dice su antigua esposa que Newt Gingrich no cree en ninguno de los valores religiosos morales que proclama y por lo tanto es un hipócrita y un mentiroso.

Para las consideraciones religiosas de índole moralista, vigentes en la sociedad estadounidense, conocer de la existencia de un planteamiento semejante por alguien que dice defender los supuestos “valores morales” al uso, tiene un efecto desastroso para aspirar a un cargo público, sobre todo si la contienda consiste en elegir al más conservador.

Es muy pronto para predecir que la hora de despelote republicano ha llegado. Quizás nunca llegue, pero a lo mejor podemos anticipar que la reconstitución del sistema partidario en Estados Unidos, está más cerca que nunca antes.